Cada vez que realizamos una compra o contratamos un servicio, estamos ejerciendo nuestros derechos como consumidores. Sin embargo, muchas personas desconocen cuáles son y cómo exigirlos.
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) ha establecido derechos básicos para proteger a los consumidores de fraudes, publicidad engañosa y otros abusos. A continuación, te explicamos cada uno de ellos y su importancia.
Derecho a la información: Todos los productos y servicios deben contar con información clara, veraz y comprobable. Esto significa que los proveedores están obligados a brindar detalles precisos sobre lo que venden, evitando exageraciones o engaños en su publicidad. Conocer este derecho ayuda a los consumidores a tomar decisiones informadas y a evitar caer en fraudes o promociones falsas.
Derecho a la educación: Saber cómo funciona el mercado y qué derechos protege la ley es fundamental para consumir de manera responsable. La educación del consumidor permite a las personas identificar malas prácticas comerciales, evitar fraudes y hacer valer sus derechos ante cualquier abuso. Profeco ofrece información y orientación para que los consumidores aprendan a comprar con seguridad y confianza.
Derecho a elegir: Los consumidores tienen la libertad de elegir el producto o servicio que más les convenga sin presiones ni condiciones injustas. Nadie puede obligar a realizar una compra, condicionar la venta ni exigir pagos o anticipos sin un contrato firmado. Este derecho protege a los consumidores de tácticas agresivas de venta y garantiza una competencia justa en el mercado.
Derecho a la seguridad y calidad: Todos los bienes y servicios deben cumplir con normas de seguridad y calidad establecidas por la ley. Esto significa que los productos no deben representar un riesgo para la salud o seguridad de los consumidores y que deben funcionar correctamente. En caso de que un artículo resulte defectuoso, el consumidor tiene derecho a una solución justa.
Derecho a no ser discriminado: Ningún proveedor puede negar la venta de un producto o servicio por razones de sexo, raza, religión, condición económica, nacionalidad, orientación sexual o discapacidad. Este derecho busca garantizar igualdad de oportunidades para todos los consumidores y evitar prácticas discriminatorias en los establecimientos comerciales.
Derecho a la compensación: Si un producto no cumple con lo prometido o es de mala calidad, el consumidor tiene derecho a exigir una reposición, la devolución de su dinero o una bonificación no menor al 20 % del precio pagado. Este derecho protege contra pérdidas económicas y obliga a los proveedores a garantizar la calidad de sus productos y servicios.
Derecho a la protección: Cuando un proveedor no respeta los derechos del consumidor o incurre en abusos, la Profeco pone a disposición el Teléfono del Consumidor, donde se pueden presentar quejas y recibir asesoría legal. Los números de contacto son (55) 5568 87 22 y 800 468 8722, con atención de lunes a viernes de 9:00 a 19:00 horas, y fines de semana y días festivos de 10:00 a 18:00 horas.
Además, Profeco cuenta con 38 Oficinas de Defensa del Consumidor en todo México para atender cualquier caso. Conocer y ejercer estos derechos no solo ayuda a evitar fraudes y abusos, sino que también fortalece un consumo más justo y seguro para todos.