El crecimiento irregular de las ciudades fue un vicio que se adoptó durante muchos años en la zona conurbada Colima-Villa de Álvarez, que de acuerdo con especialistas se ha ido corrigiendo pero aún falta mucho por hacer.
"Ordenamos y reordenamos el territorio tratando de controlar el crecimiento, se hizo como se ha un instrumento de esta magnitud en donde se ponen todas las estadísticas y se hace una estrategia del crecimiento urbano".
Esta negligencia sigue cobrando factura y cada año se puede observar cómo negocios, viviendas particulares y diferentes tipos de infraestructura, e incluso, vidas humanas resultan afectadas en periodo de lluvias y otras eventualidades.
"La regularización de asentamientos irregulares que son históricos y que pues los ciudadanos tienen la imposibilidad de acceder a servicios nos empieza a dar directrices reglamentarias para ir abordando estas problemáticas sociales".
Y a pesar de que recientemente fue actualizada la Ley de Asentamientos Humanos en el estado, municipios como Colima y Villa de Álvarez impugnaron debido a una serie de irregularidades y congruencia, por lo que continúan trabajando bajo la modalidad 94 y 97.
"Sin embargo, sí se actualizó de manera muy reciente el Programa de Desarrollo Territorial y Desarrollo Urbano // es un documento muy actualizado ahí sí tenemos directrices muy claras de hasta dónde van a preverse las reservas urbanas de aquí a 30 años más o menos".
En el caso de Villa de Álvarez, el crecimiento urbano se ha focalizado en la zona norte y poniente, mientras que en Colima hacia la zona norte y sur, lo anterior, debido a la factibilidad de los servicios.