Harvey Weinstein, el exproductor de cine conocido por su papel central en el movimiento Me Too, fue trasladado recientemente desde la cárcel de Rikers Island al Hospital Bellevue en Nueva York, donde permanecerá cuando no asista a su nuevo juicio por abusos sexuales.
La orden fue emitida por el juez Paul Goetz, quien atendió la solicitud de los abogados de Weinstein debido a su delicado estado de salud
Weinstein, de 73 años, enfrenta una repetición de su juicio tras la anulación de su condena original en 2024 por errores procesales. En este nuevo proceso judicial, que está en la fase de selección del jurado, se le imputan cargos adicionales por delitos sexuales, incluyendo una acusación presentada en septiembre pasado por un supuesto abuso cometido en 2006.
La selección del jurado ha resultado complicada debido a la notoriedad del caso, aunque ya se han elegido nueve de los doce miembros necesarios, además de seis suplentes.
El traslado al hospital responde a las condiciones médicas de Weinstein, quien padece leucemia mieloide crónica, diabetes y problemas de movilidad que requieren el uso de silla de ruedas
Sus abogados argumentaron que las duras condiciones en la cárcel, incluyendo celdas con temperaturas bajas, agravaban su estado de salud. Además, en diciembre pasado fue sometido a una cirugía cardíaca de emergencia y actualmente recibe tratamiento para un cáncer de médula ósea.
Desde que fue condenado en 2020 a 23 años de prisión, Weinstein ha permanecido en Rikers Island cumpliendo también otra condena de 16 años por delitos sexuales cometidos en California.
Sus defensores han denunciado en múltiples ocasiones las malas condiciones en las que se encontraba, incluso presentaron una demanda contra la ciudad de Nueva York por supuesta negligencia médica y trato inadecuado, buscando una compensación de cinco millones de dólares.
El juez Goetz estableció que la orden de traslado se mantendrá al menos hasta el 24 de abril, cuando se celebrará una audiencia para revisar el caso. Mientras tanto, otro juez, Curtis Farber, preside el nuevo juicio que se reanudará con la continuación de la selección del jurado
Weinstein ha negado todas las acusaciones, asegurando que sus relaciones fueron consensuadas. A pesar de su estado de salud, continúa asistiendo a las audiencias judiciales en silla de ruedas. El traslado al hospital busca garantizar que reciba el tratamiento necesario sin afectar el desarrollo del proceso judicial.
Este caso ha sido uno de los más mediáticos en Estados Unidos en los últimos años, simbolizando un cambio en la manera en que se enfrentan los delitos sexuales en la industria del entretenimiento y fuera de ella.
