El pasado jueves 25 de junio un árbol gigante se desplomó cayendo y destrozando con sus gruesos y largos brazos al menos seis vehículos que se encontraban estacionados en el estacionamiento de un negocio donde expenden pisos y azulejos.
Al parecer algunos vehículos no no estaban asegurados y otros las aseguradoras no quisieron hacerse responsables por lo que serán el propietario del establecimiento quien pague los vehículos destrozados que fueron pérdida total.
Pero los vehículos y los troncos del árbol gigante ahí siguen obstruyendo la vía pública.