AHMSA: El colapso de un imperio industrial.
La siderúrgica Altos Hornos de México (AHMSA), otrora un gigante industrial que impulsaba la economía de la región centro de Coahuila, ha iniciado formalmente su proceso de quiebra. Esta noticia ha sacudido a la industria y a las comunidades que dependían de esta empresa.
Según declaraciones de Alejandro Loya, presidente de Canacintra Monclova, "el flujo de dinero, por día, que se mueve en AHMSA es impresionante, estás hablando de millones de dólares". Esta cifra refleja la importancia de AHMSA en la economía local y regional.
A pesar de su tamaño y relevancia, la empresa se ha visto sumida en una profunda crisis financiera. La deuda acumulada, que asciende a cerca de 900 millones de dólares, ha sido un lastre insoportable. Una parte significativa de esta deuda corresponde a pagos pendientes a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y a Petróleos Mexicanos (Pemex), así como a salarios caídos de los trabajadores.
"La quiebra de AHMSA podría ser la única ruta mercantil para rescatar a la siderúrgica y abrirla al mercado", afirmó Héctor Martínez, abogado de Grupo Onyx Consultores. El proceso de quiebra permitirá reestructurar la empresa y atraer nuevos inversionistas.
Sin embargo, el camino hacia la recuperación no será fácil. El Gobierno Federal ha dejado en claro que no brindará apoyo financiero directo a AHMSA. Ricardo Patlán, ingeniero en minas, destacó la importancia de AHMSA en la producción de energía eléctrica en la región.
A pesar del panorama adverso, existe cierta esperanza. Altos Hornos de México ha recibido el interés de varios inversionistas, quienes ven una oportunidad de negocio en la adquisición de una empresa con una infraestructura sólida y una posición privilegiada en el mercado.
La quiebra de AHMSA es un duro golpe para la región centro de Coahuila, pero también representa una oportunidad para reinventarse. El futuro de esta empresa emblemática dependerá de la capacidad de atraer inversión y de implementar un plan de negocio viable y sostenible.