Por: Jorge Espejel
La bandera de los programas sociales fue una de las anclas para que el presidente López Obrador llegara al poder.
Higinio Cadena, beneficiario de la pensión para adultos mayores, agradeció, "a todos nos beneficia, la tercera edad, porque muchos ya no trabajan, otros trabajamos poco. Si no fuera por este apoyo, pues quién sabe cómo nos iría".
La movilidad social en México sigue estancada. Los pobres van en aumento. La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) proyectó que la pobreza en México aumentará 2.3 puntos porcentuales este 2022; es decir, 2.5 millones de mexicanos estarán en pobreza.
Kike Mireles, consultor político, explicó, "Los programas sociales del gobierno actual no han logrado disminuir la brecha actual de pobreza del país, al contrario, incluso hablamos de que más de 12 millones de personas han pasado a la pobreza en este sexenio".
El Índice de Desempeño de los Programas Públicos Federales contabiliza 96 programas sociales distribuidos en 15 dependencias. En 2020, para este rubro, la federación presupuestó 901 mil millones de pesos, pero al final del año gastaron más de 923 mil millones, es decir, 2.4% más de lo planificado. Los problemas de opacidad y manejo poco eficaz de los recursos no los ven los millones de beneficiarios de los programas sociales.
Tomás Robles, beneficiario de la pensión para adultos mayores, señaló "Agradecidos con el presidente por estas acciones tan buenas que nos hace llegar, esperemos que nos sigan apoyando con estos programas del adulto mayor, discapacitados, todo lo que abarca el bienestar".
El desorden financiero fue documentado por la Secretaría de Hacienda. Bienestar dejó de ejercer más de 11 mil millones de pesos enfocados para programas sociales, la Secretaría del Trabajo 1,700 millones de pesos y la Secretaría de Agricultura 2 mil 182 millones, por mencionar algunos.
Sembrando Vida y Jóvenes Construyendo el Futuro son dos de los apoyos que más riesgos de corrupción representan: ¿El punto de encuentro? La falta de vigilancia en la dispersión de los recursos.
A septiembre del 2022, el Gobierno Federal tiene a 18 millones 814 mil 611 personas registradas en algún programa o subprograma social.
Si el gasto social no se dispersa de manera más estricta y ordenada, el objetivo, como hasta el día de hoy, será un sueño inalcanzable.