El pasado fin de semana cientos de personas abarrotaron un plaza, con el objetivo de adquirir una gorra autografiada por el YouTuber Markitos Toys.
Desde temprano, el sábado por la mañana, sin importar el sol, se observaban largas filas, sin respetar la sana distancia, y algunos fanáticos sin cubrebocas, entre ellos menores de edad.
Este hecho causó gran indignación en redes sociales, que criticaron este hecho, pues aún en la entidad hay un alto número de contagios de Covid-19.
También ocasionó la intervención de las autoridades, ya que COEPRISS acudió al lugar a colocar los sellos de suspensión al local comercial donde se estaban vendiendo las gorras, por propiciar aglomeraciones que ponen en riesgo la salud de los ciudadanos.