En un evento tachado de "saciar egos" y carente de validez jurídica, el pasado sábado se llevó a cabo el Segundo Informe del gobierno estatal en Sinaloa. Paola Garate Valenzuela, dirigente del PRI Sinaloa, arremetió contra el gobernador Rubén Rocha Moya, alegando que ha llevado al estado a perder dinamismo, paz y estabilidad política, describiéndolo como un líder cascarrabias.
Garate Valenzuela señaló prácticas "completamente desactualizadas", etiquetando al gobernador como el verdadero conservador, pues el evento, según ella, se convirtió en un circo con aplausos pagados, donde trabajadores afirmaron haber sido amenazados para asistir, reflejándose en la multitud de acarreados.
La dirigente del PRI lamentó que los recursos ciudadanos se destinen a este tipo de eventos en lugar de atender las verdaderas necesidades de la población, denunciando el uso inapropiado de los fondos públicos.