Desde el pasado lunes 17 de agosto, la Unión de Locatarios del Centro de Culiacán instaló una huelga a las afueras del Ayuntamiento de Culiacán, como parte de las protestas que han mantenido contra las decisiones del alcalde Jesús Estrada Ferreiro de mantener peatonales algunos tramos de calles del centro de Culiacán.
Esta manifestación, decidió convertirse, ese mismo día por la tarde, en huelga de hambre cuando dos de sus integrantes, desesperados, buscaban alternativas para sensibilizar a las autoridades municipales, advirtiendo que de no abrirse las calles y permitir la circulación vehicular, y el retorno del transporte público a todas las calles del centro, ellos no se moverían de este lugar.
Sin embargo, al quinto día de haber iniciado esta huelga de hambre, los comerciantes no resistieron más y tuvieron que ser trasladados por Cruz Roja para recibir atención médica, pues además de la falta de alimento, debido a las altas temperaturas que se registran la ciudad presentaban problemas de deshidratación.
Al ser dados de alta decidieron continuar con su lucha, y aunque tuvieron que abandonar la huelga de hambre, permanecen en plantón, de manera indefinida, frente al Palacio Municipal, dicen, hasta que reabran las calles para tratar de rescatar sus negocios.
"Si con la mala economía, le aunamos la falta de circulación... no tenemos clientes con las calles cerradas" Miguel Ángel Millán, Presidente de la Unión de Locatarios del Centro de Culiacán.
Para los comerciantes no hay otra opción, es urgente la reapertura total, de lo contrario, aseguran, la economía del centro morirá, es por eso, y por cuidar la salud y seguridad de quienes originalmente iniciaron esta huelga, que se han ido sumando más y más comerciantes a la protesta.
De acuerdo con el líder, Miguel Ángel Millán, ya cuentan con un padrón de más de 130 comerciantes del centro, que se estarán turnando, para permanecer, día y noche, defendiendo esta causa.
