El auditorio lince de la Universidad Autónoma de Occidente fue testigo del primer debate de Candidatos a la gubernatura, el cual fue organizado por el Instituto Electoral del Estado de Sinaloa, donde participaron los ocho contendientes al Gobierno del Estado.
Debido a la contingencia sanitaria, los partidos, candidatos, y el órgano electoral acordaron que el formato del debate seria virtual, por lo cual no se permitió la presencia de público en el auditorio, sin embargo las calles alrededor de la Universidad se inundaron de simpatizantes de las distintas fuerzas políticas que acudieron a demostrar su apoyo a los candidatos, pero también para presumir la estructura electoral de cada uno.
En cuanto al desarrollo del debate, debido al alto número de participantes, no pudo dividirse en bloques con temas específicos, simplemente se les otorgaron 2 minutos y medio a cada uno de los candidatos para que presentaran su plataforma política, y un minuto de réplica.
Pese al acotado tiempo, gran parte del debate fue usado por los candidatos para atacarse mediante señalamientos y acusaciones, y de manera superficial presentaron propuestas en distintos temas, entre los que destacó la reactivación económica, el sistema de salud, la estrategia de seguridad, y la educación.