Los primeros días de abril, una sola funeraria recibió dos servicios por coronavirus, un hombre y una mujer mayores de 50 años procedentes del Instituto Mexicano del Seguro Social de la T-58 y T-1, Tomás Arroyo, empresario del sector, señaló que ante la contingencia no se han visto económicamente afectados debido aunque ya no se pueda hacer el servicio de embalsamado y velación.
Agregó que los empleos se han conservado, sin embargo se han implementado medidas más severas de limpieza, así como adquirir uniformes especiales para poder trasladar el cuerpo infectado directamente al panteón.