La administración pasada de José Joel Boucieguez, intentó desaparecer la paramunicipal del Acuario y entregar la administración a la nueva concesionaria pero no ocurrió así, por lo que como un triunfo de la ciudad sobre el interés empresarial de quedarse con algo que no le pertenece, calificó el alcalde Luis Guillermo Benítez Torres las modificaciones logradas a través de un adendum al contrato de concesión para un nuevo Acuario, dentro del proyecto del Parque Central de Mazatlán.
El contrato, firmado el 28 de noviembre del año en curso, con la participación de todas las partes involucradas en el proyecto, impide que el desarrollador del nuevo Acuario tenga total control de la administración y de los ingresos de ese nuevo atractivo turístico, y el cierre de la actual paramunicipal.
"Cuando hay voluntad política de defender lo que pertenece a la ciudadanía se puede. La diferencia entre la concesión original y la concesión modificada radica en que en un principio era una concesión pura, donde el desarrollador tenía el control del cien por ciento de la administración y construcción del Acuario... hoy firmamos el convenio en una concesión mixta, donde el municipio tiene el veinte por ciento del Consejo de Administración, el cuatro por ciento de los ingresos brutos a partir de la apertura de la Acuario, el dos por ciento por la propiedad del terreno", explicó el presidente municipal en el marco de la conferencia semanal "De cara al pueblo".
El primer edil agregó que el contrato de concesión también contempla la eliminación de pasivos laborales, de los que se encargará el desarrollador, además de que el municipio se reserva el derecho de que, en caso de que el concesionario abandone la obra, la pueda otorgar a quien la ciudad considere.
El Químico Benítez Torres reiteró que el actual Acuario no se extinguirá, como lo contemplaba en un principio el contrato firmado por la anterior administración, las modificaciones logradas con el adendum establecen que la paramunicipal se modificará, pero continuará administrando el inmueble y generará ingresos por la permanencia del show de lobos marinos.
"La administración logró que, al inicio de la etapa de prestación de servicios del desarrollador, la paramunicipal denominada Acuario Mazatlán cambiará su denominación, objeto y razón social conforme a las leyes, reglamentos y decretos aplicables vigentes, pero no será decretada extinta, prosiguió; esta paramunicipal podrá tener el servicio y conservar el espectáculo de lobos marinos, porque el nuevo Acuario no contempla este tipo actividades".
El alcalde reveló que aunque el contrato firmado inicialmente por la administración anterior el 30 de octubre de este año, daba un plazo de sólo veinte días para la firma del contrato de concesión con el desarrollador, so pena de recibir una sanción de cinco millones de pesos por incumplimiento; la administración a su cargo logró firmar dicho documento en tiempo y forma, incluyendo además las modificaciones expuestas con las que se protege el derecho de la ciudad de recibir un beneficio por la operación del nuevo Acuario.