Ismael "El Mayo" Zambada García, líder histórico del Cártel de Sinaloa, solicitó al Gobierno de México su repatriación, argumentando que su detención en Estados Unidos fue ilegal. Su defensa presentó la demanda el 20 de febrero de 2025 en el Consulado General de México en Nueva York, señalando que su arresto fue resultado de un engaño orquestado por Joaquín Guzmán López, hijo de Joaquín "El Chapo" Guzmán. Además, advirtió que, de no atenderse la petición, podría generarse un "colapso" en la relación bilateral entre ambos países.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, afirmó que su gobierno revisará el caso desde un enfoque de soberanía y derechos humanos. "Es derecho de cualquier ciudadano mexicano ser defendido si considera que no se siguieron los procedimientos correctos en su detención o juicio", declaró. No obstante, aclaró que esta revisión no implica una defensa de Zambada, sino un análisis de la legalidad de su arresto y traslado a Estados Unidos.
El caso ocurre en un contexto de creciente violencia en Sinaloa, particularmente en Culiacán, donde se han registrado enfrentamientos entre facciones del Cártel de Sinaloa tras la detención de Zambada. Además, la solicitud de repatriación surge poco después de que el Departamento de Estado de EE. UU. designara al Cártel de Sinaloa y otras organizaciones criminales como grupos terroristas, lo que aumenta la presión sobre ambos gobiernos en la lucha contra el narcotráfico.