Son uno de los grupos vulnerables olvidados en esta pandemia, no están afiliados a ninguna dependencia de salud, no son poblanos pero debido a la situación que enfrentan en su país se encuentran radicando en Puebla, estamos hablando de los migrantes.
La ONU ha mencionado que los migrantes deben tener acceso a la salud y deben ser tratados como cualquier otro ciudadano en esta emergencia, sin embargo en el estado aún no se han mencionado qué derechos tendrán los migrantes provenientes de otros países, acción que va viceversa, ya que también existen poblanos en calidad de migrantes en diferentes partes del mundo.
Son seres humanos, son familias, que han sido afectados por esta emergencia de salud, en el mundo según la ONU los principales afectados son aquellos que laboran en sectores alimenticios y construcción donde tradicionalmente los migrantes desempeñan funciones y la falta de trabajo también traerá consecuencias a las familias latinas que dependan de ellos.
De acuerdo con cifras del Banco Central, en 2019, Puebla recibió un total de mil 763 millones de dólares de remesas familiares, cifra que posicionó a la entidad en el sexto estado con mayor ingreso de dólares.
Los municipios que representaron el 70% en ese mismo año, fueron Puebla Capital, Acatlán, Atlixco, Izúcar de Matamoros, San Martín Texmelucan, San Pedro Cholula, Tehuacán y Tulcingo, localidades que también representan los primeros lugares en migración.
Y aunque diversos medios han reportados la disminución de caravanas migrantes en el mundo, este problema sigue afectando de manera recíproca en diferentes países, que como lo ha mencionado la ONU, los gobernantes deben de tomar importancia sobre el acceso universal a la salud pública.