"Sentimos pues lo peor, que nos íbamos a morir todos, ¿Qué va a pensar uno en ese rato?" Luis, Habitante de Jesús María
"Estábamos dormidos, fue como a las 4 y media de la mañana, cuando los impactos, nosotros nos refugiamos en un clóset porque no teníamos dónde escondernos y nos metimos adentro de un clóset para salvarnos porque las balas estaba cayendo arriba" Rosario, Habitante de Jesús María.
La lluvia de disparos despertó a los habitantes de la Sindicatura de Jesús María en el municipio de Culiacán, el pasado jueves 05 de enero.
Nadie sabía lo que ocurría, pero el temor se apoderó del pueblo, ya que fue un hecho sin precedentes, que más tarde se dio a conocer fue el resultado de un operativo para la captura de Ovidio Guzmán, alias "el ratón".
"Yo aquí nací, tengo 75 años cumplidos, voy a cumplir los 76 años, y jamás en la vida de se había visto algo así, ni cuando dicen de tanto bandidaje, tanta cosa mala que hubo, no se compara" María, Habitante de Jesús María.
Fueron ocho horas ininterrumpidas de disparos, y las evidencias quedan en las paredes y techos de las casas.
En medio del pueblo se puede ver un portón de metal con impactos de bala, al ingresar te recibe una explanada repleta de casquillos y balas, así como rastros de sangre que te atestiguan que ahí hubo un fuerte enfrentamiento.
En ese inmueble señalan los pobladores, vivía Ovidio.
La fachada de la casa mientras los orificios de balas, las ventanas se encuentran destrozadas, balas y cristales por todas las habitaciones.
Al ver el interior está claro que Ovidio estaba con su familia, hay biberones, pañales, juguetes y otros artículos de niños.
Todas las habitaciones tienen rastros de sangre seca, y están completamente desordenadas y saqueadas.
La cocina y comedor guardan un fuerte olor por la comida que quedó servida y que comienza a echarse a perder.
Ya pasaron varios días y el desorden de esa casa también es el del pueblo, que quedó muy lastimado con este evento.
"No crea que estamos muy bien todavía, estamos espantados" Rosario, Habitante de Jesús María.
Los habitantes de Jesús María están molestos, asustados, y no quieren que el ejército siga en el pueblo, pues aseguran no son delicuentes.
"La mayoría son trabajadores: pescadores, en la obra, en el campo, jornaleros, ganaderos, agricultores, la mayoría, los que andan esas cosas son otro gente, la gente de aquí, la mayoría, al que le preguntes, son trabajadores que viven del diario" Luis, Habitante de Jesús María.
Los rumores siguen fuertes, y la presencia de los militares en las calles les hacen creer que esto no ha terminado.
"Dándole gracias a Dios de que todo salió bien, que nada le pasó aquí a mi familia, pero a veces se siente uno atemorizado por lo que plática la gente" Rosy, Habitante de Jesús María.
Las autoridades permanecen en el sitio con una "Caravana Humanitaria", ofreciendo asistencia alimentaria, servicios médicos, y alimentación, sin embargo para los pobladores no es suficiente para afrontar la tremenda crisis que les dejó este operativo.
"Pa' mi es un abuso que vengan a traer despensas, si la gente no nos estamos muriendo de hambre, nos estamos muriendo de preocupación... Lo que necesita uno es pues que diría yo, pues paz, que no venga todavía a matar" María, Habitante de Jesús María .
La gente de Jesús María quiere retomar sus actividades, pero no saben cómo superar la situación y el miedo a salir de sus hogares sigue latente.
"Tenemos miedo también de dejar a la familia sola, no sabemos qué, pues ya más que nada yo creo que el miedo, el temor a que vuelva a pasar eso, ya uno está con ese temor" Luis, Habitante de Jesús María.