Como parte de las consecuencias por la pandemia del coronavirus, de enero a marzo de 2021, los bancos del país realizaron una disminución de 867 sucursales en el país, y la pérdida de más de un millón de contratos de tarjetas de crédito, lo que contrastó con la digitalización y el uso de medios alternos al efectivo que mostraron un avance significativo.
De acuerdo con datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) las sucursales de los 50 bancos que operan en México, reportaron una disminución de 6.7 por ciento, manteniendo 11 mil 912 puntos de contacto con los clientes, lo que representa una cifra menor a las 12 mil 779 que sumaban en el primer trimestre de 2020.
La reducción en la disponibilidad bancaria eleva el riesgo de exclusión financiera, pues la meta de las instituciones financieras es llegar al total de los municipios del país en 2024, como punto de referencia, de 2019 a marzo pasado, el avance de la cobertura ha sumado 227, por lo que de acuerdo con la Asociación de Bancos de México (ABM) la cobertura bancaria es del 87.2 por ciento.
Respecto a la contratación de tarjetas de crédito, la CNBV indica una reducción de un millón 13 mil 64 tarjetas que fueron dadas de baja por los clientes, lo que dejó a la banca con un total de 27 millones 707 mil 743 contratos, menos que los 28 millones 720 mil 807 registrados el mismo periodo de 2020.
En contraste, la pandemia aceleró aún más la digitalización de los bancos, colocando los medios de pago digitales y alternos al efectivo, por encima incluso, de las disposiciones en cajeros automáticos.