Ante la contingencia que enfrenta el estado por Covid-19 la misa dominical celebrada en la Catedral de Puebla se realizó a puerta cerrada permitiendo que los fieles católicos siguieran la misa a través de redes sociales.
Al respecto, el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa recomendó a los poblanos que aún con la situación que se vive continúen preparándose para la cuaresma porque es un tiempo de purificación y comprensión.
Además, a través de la Arquidiócesis informaron que las celebraciones de sacramentos ya agendadas como bautizos, bodas, misas feriales podrían celebrarse con el menor número de fieles implementando en todo momento las medidas sanitarias y evitando el contacto físico, medidas que entrarán en vigor a partir del 23 de marzo.
Asimismo, para evitar el acercamiento físico en las confesiones, los fieles recibirán la absolución de sus pecados de manera comunitaria.