Por: Gastón García Miranda
El Gobierno Federal propone que la Guardia Nacional se transfiera de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana a la Secretaría de la Defensa Nacional. De concretarse, esta decisión comprometería el futuro de la Secretaría de Seguridad Federal, que de entrada, se debilitaría al reducirse su presupuesto y funciones, entre las que destacan:
César Gutiérrez, especialista en Derecho Penal, Militar y Seguridad Nacional, expresó, "de todas maneras el enlace que tiene que ver con la estadística, con los números que tienen que ver con los crímenes cometidos a nivel nacional, va a seguir siendo la SSC".
En casi cuatro años de administración se han asignado 103 mil millones de pesos a la Guardia Nacional, recursos que están dentro del presupuesto de la secretaría, la cual perdería el enorme peso que hoy tiene dentro del gabinete.
David Saucedo, especialista en temas de seguridad pública, externó su preocupación, "esta dependencia se convertiría prácticamente en un cascarón". A lo mejor serviría para llevar las estadísticas a la conferencia mañanera.
César Gutiérrez, secundó, "creo que sí se va a convertir en un gran cascarón e incluso también podrá ser absorbido por la Secretaría de Gobernación el motivo principal para el cual fue creado dejaría de existir como tal" Otra posibilidad es que se degrade a subsecretaría de otra dependencia o simplemente desaparezca. David Saucedo, agregó, "yo creo que el presidente sí está contemplando junto con su equipo la disolución de la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, aunque políticamente sería algo costoso, Mediáticamente también, a lo mejor la mantienen con vida aunque con un presupuesto reducido".
Pero al parecer el gobierno tiene otros planes. Andrés Manuel López Obrador, Presidente de México, dijo "estoy pensando en que sea la Secretaría de Seguridad Pública y Justicia voy a pedir a Rosa Icela Rodríguez que, aparte de su tarea de coordinar lo de seguridad, vea estos casos de justicia".
Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana. Destino incierto