Desde que se detectó por primera vez el brote de COVID-19, los principales síntomas que se le atribuían al virus fueron tos seca persistente, fiebre y cansancio, sin embargo, tras cuatro meses de que la propagación de esta enfermedad comenzara, médicos han atribuido más síntomas que anteriormente no se habían considerado.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos decidieron incluir seis nuevos síntomas en la lista de los que se atribuye a esta enfermedad, los cuales son:
Escalofríos
Temblores y escalofríos que no ceden
Dolor muscular
Dolor de cabeza
Dolor de garganta
Pérdida del olfato o el gusto
Cabe mencionar que estos síntomas, además de los "clásicos" (tos y fiebre) no siempre se presentan todos al mismos tiempo, puede ser una combinación de ellos y se manifiestan entre los dos primeros días de haber tenido contacto con una personas infectadas, hasta los 14 días después.