Aseguran amas de casa que por la contingencia sanitaria y el desempleo de los esposos, han tenido que gastar menos en la comida y aprovechar los recalentados.
Lucía Díaz, ama de casa señala que a su esposo le adelantaron utilidades, prestaciones y vacaciones, pero va a llegar el momento en que el dinero no les alcanzará y no habrá de otra que salirse a trabajar y no hacer caso de quedarse en casa.