La pintura llamada "San Sebastián atendido por dos ángeles", que había sido dada por perdida durante 300 años, podría alcanzar los 7.7 millones de dólares. El cuadro es atribuido al pintor Peter Paul Rubens.
De acuerdo al portal especializado Artnet, una obra del pintor flamenco Peter Paul Rubens, que había sido confundida con otra, y por lo tanto, dada por perdida durante 300 años, será subastada a principios de julio y se estima podría alcanzar los 7.7 millones de dólares.
Se trata de la obra "San Sebastián atendido por dos ángeles", que fue registrada por última vez en la colección de sus benefactores genoveses en la década de 1730, y hace unos 15 años reapareció en Misuri, Estados Unidos, lugar en donde se le atribuyó al pintor francés Laurent de la Hyre. Durante ese lapso de tiempo fue vendida en Ivey-Selkirk, una casa de subastas de St. Louis, por tan solo 40 mil dólares.
Por su parte, académicos y expertos del equipo de la casa de subastas Sotheby 's usaron rayos X para observar debajo de la superficie de la pintura y recientemente confirmaron que, de hecho, es una obra de Rubens, y además, descubrieron que se trata de la "primera" versión de otra importante obra del artista que hasta hace muy poco tiempo se había considerado única.
ESTIMACIONES
De acuerdo a la casa británica de subastas Sotheby 's, la pintura saldrá a la venta en Londres, Reino Unido, el próximo 5 de julio con una estimación de entre 5 a 7.7 millones de dólares.
Hasta el momento, los expertos en historia creen que la obra, que representa la difícil situación de Sebastián, un oficial del ejército romano y un converso al cristianismo que fue víctima de persecución religiosa, se ejecutó alrededor de 1606-1608 en Italia, o de 1609-1610 en Amberes; sin embargo, no existe un consenso académico definitivo.
UN POCO DE HISTORIA
De acuerdo a expertos, es probable que la pintura fuera encargada por Ambrogio Spinola, quien fue un noble y comandante militar italiano, y con el que el artista compartía intereses diplomáticos, políticos y artísticos, y a quien pintó en varias ocasiones.
El primer registro conocido de la pintura figura en el testamento del hijo de Ambrogio, Filippo Spinola en 1655, antes de que pasara por sucesivas generaciones de la familia durante ochenta años, hasta 1731, cuando pasó a figurar como herencia de la nieta del mecenas, Anna Spinola.
Se le perdió la pista hasta su reaparición 230 años después, en 1963, en una colección en Missouri, Estados Unidos. Más tarde, en 2008 fue adquirido por su actual propietario como cuadro de Laurent de la Hyre.
TECNOLOGÍA COMO ALIADO DEL ARTE
El análisis de rayos X también reveló secretos adicionales sobre el estado de la pintura, ya que el artista hizo cambios radicales en el diseño mientras pintaba, alterando y retocando la composición.
Gracias a dichos análisis, se sabe que pintó primero a San Sebastián mirando hacia el lado contrario, girado hacia la izquierda y con el brazo derecho levantado sobre la cabeza. Originalmente había una flecha perforando su muslo derecho y la armadura fue una adición posterior a la obra, pintada encima de otra cosa que Rubens raspó.