Héctor Roberto Hernández Jiménez, un estudiante del Instituto Politécnico Nacional (IPN), desarrolló una innovadora herramienta llamada Signal Glove, un guante diseñado para traducir la Lengua de Señas Mexicana (LSM)
El James Dyson Award es un concurso internacional de diseño que motiva e inspira a la próxima generación de ingenieros en diseño y está dirigido a estudiantes actuales y recién graduados en esta disciplina. Este año, el dispositivo creado por Hernández obtuvo el primer lugar a nivel nacional y avanzará a la etapa internacional. Su creación busca mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad auditiva, facilitando su comunicación con quienes no dominan la lengua de señas.
Héctor Roberto logró ganar 109,000 pesos mexicanos. Según el concurso, "lo que está en juego" es una oportunidad invaluable para que quienes aspiran a ser inventores puedan hacerse un nombre en la industria. Además del premio en efectivo, los ganadores pueden obtener una gran visibilidad mediática, impulsar su carrera profesional, ganar el reconocimiento del sector y, quizás, lanzar su propio negocio.
Signal Glove es un dispositivo accesible, construido con materiales resistentes y de bajo costo, lo que lo hace potencialmente disponible para un amplio público en el futuro
El guante cuenta con un diseño ergonómico que incluye sensores avanzados ubicados en las puntas de los dedos, permitiendo una detección precisa de los movimientos. A diferencia de otros dispositivos que utilizan sensores flexibles, Signal Glove incorpora cinco giroscopios que miden tanto la posición como la presión de cada dedo, garantizando una interpretación exacta de las señas.
El funcionamiento del guante es intuitivo , ya que, al colocarlo en la mano, un LED rojo se activa para indicar que el sistema está calibrándose; cuando el LED cambia a verde, el usuario puede comenzar a realizar los movimientos correspondientes a la LSM. Cada gesto se traduce en tiempo real a letras que aparecen en una pantalla LED conectada al dispositivo. Esto permite que el receptor pueda leer el mensaje que se origina en el guante.
Hernández ha manifestado su intención de mejorar aún más su creación, trabajando en la integración de nuevas tecnologías que permitirán al guante conectarse a teléfonos inteligentes y otros dispositivos mediante Bluetooth
Además, se están desarrollando algoritmos y redes neuronales que permitirán formar frases completas en lugar de solo letras individuales. Este tipo de innovaciones es crucial, ya que en México se estima que aproximadamente 2.3 millones de personas tienen discapacidad auditiva. De ellas, más del 50 % son mayores de 60 años, poco más del 30 % tienen entre 30 y 59 años, y cerca del 2 % son niñas y niños, según datos de la Secretaría de Salud.