Desde hace algunos días, los transportistas aseguran que han tenido que afrontar la escasez de diésel, lo que también ha generado un incremento excesivo en los costos del combustible, generando grandes pérdidas y dificultando su trabajo.
Comentan que tan solo en las últimas semanas se pasó de tener un precio de 22 pesos por litro de diésel, a alcanzar los 27 pesos, debido a que son pocas gasolineras dónde lo encuentran y estas se aprovechan para vender más caro.
Los transportistas señalan que es muy complicado buscar el combustible y que algunas unidades hasta han tenido que parar debido a la falta del mismo.
Su mayor preocupación es tener que detener más unidades por falta de combustible o al no poder pagarlo, ya que esto afectaría gravemente la operación del servicio de transporte público no solo en Culiacán, sino en todo Sinaloa.