El huracán Ida pegó con fuerza a Estados Unidos, principalmente a Nueva York y Nueva Jersey, hasta el momento 46 personas han muerto, debido a las graves inundaciones y de acuerdo con las autoridades la cifra podría aumentar.
Tan solo en Nueva Jersey 23 personas fallecieron.
De acuerdo con el gobernador Phil Murphy, muchas personas quedaron atrapadas en sus vehículos y fueron "alcanzadas por el agua". Hay varios desaparecidos.
"Vamos a retener un resumen completo de las pérdidas de vidas. Se distribuyen en un puñado de condados, en gran parte concentrados, no del todo, pero en gran parte concentrados en el centro de Jersey y algunos en el norte", dijo Murphy.
Docenas han muerto en seis estados del este (Connecticut, Maryland, Nueva Jersey, Nueva York, Pensilvania y Virginia) después de que la tormenta trajo lluvias sin precedentes a algunas áreas.
Las próximas semanas serán difíciles para los damnificados del huracán Ida, ya que no tienen electricidad y agua potable.
Un policía estatal en Connecticut perdió la vida tras ser arrastrado cuando respondía a la llamada de auxilio de una persona desaparecida
Ayer los rescates acuáticos continuaron en algunas áreas, y en la ciudad de Nueva York un nuevo grupo de trabajo estaba yendo a las casas para asegurarse de que no hubiera más víctimas en los sótanos.
En el sur de Nueva Jersey, los residentes estaban limpiando tras un tornado que arrasó casas, uno de los ocho tornados que azotaron el noreste.
Mientras que en Filadelfia, algunas calles se inundaron, lo que retrasó los servicios de trenes y autobuses de la ciudad, cerró los edificios y llevó a los líderes a instar a las personas a trabajar desde casa.
Los rescatistas navegaron en botes por las calles inundadas el jueves por la mañana en Filadelfia y sus alrededores, el norte de Delaware y partes del estado de Nueva York, transportando a personas desde las casas inundadas.
En Pensilvania, más de mil personas han sido rescatadas, dijo el director estatal de manejo de emergencias, Randy Padfield.
El presidente Joe Biden decretó estado de emergencia.
"Mi mensaje para todos los afectados es que estamos juntos en esto. La nación está aquí para ayudar", afirmó Biden en un discurso en la Casa Blanca que llega un día antes de su viaje a Nueva Orleans (Luisiana), una de las ciudades más afectadas por el huracán y donde la mayoría de los vecinos siguen sin electricidad.