Con el objetivo de realizar un coto privado con espacio para 400 casas, Octavio Jorge Cortés Jiménez, desarrollador particular, inició trabajos de excavación en un terreno ubicado entre avenida Munich y calle Del Guayabo, esto con la intención de desviar un arroyo de la ampliación Villa Verde para que este no afectara dicha obra.
Ante esto, los vecinos de la zona se alertaron debido a que si el arroyo de esa zona se desvía tal y como lo estaban trazando; provocaría la inundación de cientos de casas en los tiempos de lluvia, por lo que esta mañana el alcalde de Mazatlán, Edgar González acudió hasta el lugar para escuchar a los vecinos, quienes manifestaron no estar en contra de la obra, pero si en contra de que se realice la desviación al arroyo, así lo expresó Miriam Rodríguez, vecina del lugar.
"El fraccionamiento Coto Munich, nos estaba desviando el arroyo que pasa por Arboledas Invies y desemboca por el puente del vado y Ampliación Villa Verde. Nosotros no nos ponemos a qué se construya una casa, que se construyen las que quieran, pero que siempre y cuando; respeten el cauce natural como viene el arroyo, porque es una zona de inundación y nos vamos a inundar, así como lo están planeando porque están abriendo zanjas para desviar el arroyo" expresó.
Rápidamente González Zatarain indicó a Protección Civil, Obras Publicas y Planeación, realizar los estudios correspondientes de la obra, así como las afectaciones que esta pudiera generar, ya qué el desarrollador podía realizar los trabajos de excavación en la zona, pero no de desviar el arroyo, debido a que para hacer esto se requiere de un estudio y permiso de CONAGUA.
El propietario del terreno; Octavio Jorge Cortés Jiménez acató el llamado de las autoridades deteniendo los trabajos de manera inmediata, sin embargo, explicó que solo se trataba; "de una prueba".
"No hemos iniciado estábamos haciendo nada más terracería, de hecho, primero se limpió y estamos viendo por donde iba a pasar todo (el agua), y limpiando. No tapamos, el gua sigue corriendo por donde va, esta era una prueba para ver hacia donde caminaba". Explicó.
Ante esto, los vecinos quedaron conformes, pero se determinó en que Cortés Jiménez no podía volver a reactivar los trabajos hasta contar con los permisos correspondientes y mucho menos facultarse a tapar y desviar dicho arroyo.