Han sido insuficientes las estrategias implementadas y el fomento a la cultura hacia el respeto de la mujer, reconoció la Titular del Instituto Sinaloense de las Mujeres, Araceli Tirado Gálvez quien informó que con las tres muertes en menos de 24 horas este miércoles, ya suman 32 casos de feminicidios en Sinaloa en lo que va del año.
Indicó que dentro del ISMUJERES es necesario seguir redoblando esfuerzos, ya que precisó que aunque durante este año, se ha tenido una disminución del 30 por ciento en cuanto al 2017, cuando se registraron 50 feminicidios, se necesita generar un seguimiento puntual por una parte con las investigaciones que realiza la Fiscalía General del Estado y por la otra con la implementación de estrategias, con el objetivo de disminuir estos delitos.
En ese sentido Tirado Gálvez adelantó que en las próximas semanas se pondrá en marcha un proyecto, que tendrá una inversión de un millón 500 mil pesos, con el objetivo de poder actualizar el protocolo de feminicidios, es decir crear un modelo de atención a las mujeres y un protocolo de cómo disminuir estos delitos.
"En el 2018 traemos la cifra de 29, en este caso más los tres estaríamos hablando de 32 feminicidios, hemos estado en contacto con la fiscalía para que se les den puntual seguimiento a cada uno de estos casos y sobre todo que sea velado el respeto y se les garantice en cuanto al debido proceso".
Tirado Gálvez agregó que lo que comienza con una violencia, psicológica, física o económica puede terminar en un feminicidio, así mismo señaló que de acuerdo al Banco Nacional de Vivienda y Hábitat se tiene registro que en Sinaloa 2543 son violentadas, de las cuales 1092 son psicológica, 659 física y 430 de manera económica.
Cabe destacar que como parte de la prevención de feminicidios, la Presidenta del ISMUJERES comentó que en el instituto se brindan atenciones, principalmente psicológicas, teniendo un registro durante estas dos semanas de 126 atenciones a féminas; también resaltó que continúan capacitando a unidades itinerantes, que puedan trasladarse en las zonas de Sinaloa donde se presentan más casos de violencia femenina y feminicidios.