El proyecto para reducir el consumo de bolsas y popotes de plástico, y promover su fabricación con materiales reciclados, quedó en el olvido para el Gobierno de Jalisco y los municipios no tienen los mismos criterios en sus reglamentos.
Según la Norma Estatal Ambiental NAE-SEMADET-010/2019 que establece criterios técnicos para la producción de bolsas y popotes de plástico, la Secretaría del Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (Semadet) debió tener listos a finales de abril los lineamientos para elaborar, publicar y actualizar un padrón de empresas certificadas que cumplen con la producción de bolsas y popotes, algo que más de tres meses después sigue sin ocurrir.
Comunicación Social de la dependencia aseguró que el retraso se debe a la suspensión de plazos por la pandemia, y advirtió que el tema ya está en manos de la Secretaría General de Gobierno.
En este padrón de empresas certificadas -de existir- se podría encontrar a los proveedores de bolsas y popotes que cumplen con la cantidad de plástico reciclado que exige la norma: este 2021 un mínimo de 20 por ciento y cada año un aumento paulatino hasta llegar al 2024 con una fabricación de al menos el 40 por ciento de material reciclado.
En teoría, sólo las bolsas y popotes que cumplan la norma pueden ser comercializadas y distribuidas en negocios.
Pero además de la ausencia del padrón de productores certificados, falta uniformidad en los reglamentos de municipios, que aplican las inspecciones y sanciones.
Por ejemplo, Guadalajara sólo permite que se entreguen bolsas y popotes conforme a la norma, contempla campañas de concienciación y educación ambiental, y las sanciones se comenzarán a aplicar hasta el año 2021, aún sin definir el monto.
En cambio, en Zapopan se prohíben popotes y bolsas, además de estar vetado también el unicel, mientras las sanciones en son aplicables desde febrero pasado y las multas pueden ir desde los 2 mil 600 pesos hasta más de tres millones de pesos (de 30 a 35 mil Unidades de Medida y Actualización, según el artículo 128/F/11 de la Ley de Ingresos).
En Tlaquepaque está prohibido distribuir gratuitamente y comercializar bolsas y popotes que no cumplan con la norma estatal, las sanciones comenzarán por apercibimientos en noviembre y las multas comenzarán a aplicar hasta mayo del 2021, y aunque no se ha definido si tendrá una multa específica, el actual reglamento aplicaría sanciones que rondan entre los mil 500 y los dos mil pesos (según el artículo 122 de la Ley de Ingresos).
Finalmente, en Tonalá se prohíbe proporcionar bolsas y popotes fuera de norma, con sanciones que se aplicarán hasta agosto de 2021, previa definición de los montos.
Hasta el momento, la prohibición de las bolsas de plástico y popotes no parece haber contribuido a reducir la cantidad de basura que se genera en Jalisco: según los indicadores oficiales de MIDE Jalisco, hasta junio de 2020 se han generado en Jalisco más de 14 mil toneladas de basura por encima del mismo periodo del año pasado.
Según cifras del INEGI, Jalisco genera el 7.6 por ciento de toda la basura del país, siendo el tercer estado en cantidad de desechos, sólo después de la Ciudad de México y el Estado de México, y alrededor del 23 por ciento de los residuos son productos de y 7 por ciento plástico.
Estimaciones de la ONU señalan que cada año, alrededor de 8 millones de toneladas de bolsas de plástico terminan en los mares.
ACEPTAN RESTRICCIÓN
Entre los pocos negocios que sí comenzaron a aplicar la restricción en la entrega de bolsas de plástico están los supermercados. Meganoticias realizó un sondeo para conocer si la ciudadanía acepta o rechaza la medida, y cómo le hacen frente cuando hacen compras y no llevan sus propias bolsas. Esto es lo que nos compartieron:
"Me parece muy bueno, porque así reciclamos y ya no contaminamos tanto, muy bueno para todos los supermercados, que ya no nos dan bolsa, es mucho mejor", consideró María Elena, vecina de la colonia Independencia, de Guadalajara.
"A mí en lo personal me parece muy bien, creo que tenemos que acostumbrarnos a traer nosotros bolsas de tela o de lo que tengamos para cargar nuestros productos, hay que ayudar en algo a la naturaleza", afirmó Raquel Rodríguez, habitante de Huentitán el Bajo, en Guadalajara.
"A mí me parece bien, menos contaminación", comentó Bertha, vecina de la colonia Tabachines de Zapopan, "lo malo es que no quieren perder clientes, por eso siguen dando ese tipo de bolsas, pero sería muy bueno que dieran ecológicas, que ya hay, de plástico, o que cada quien lleve su bolsa, es lo más práctico".
"Me parece mal, porque cuando viene uno preparado, pues bueno ¿pero cuando no?" , cuestionó Victoria Cervantes, vecina de la colonia La Normal, de Guadalajara, quien mostró su bolsa de tela ya rota de tanto uso: "compré una de éstas, y mira ya la fui reforzando y reforzando, ya se me ha roto, mira".
"Está complicado, porque ahora nos están vendiendo bolsas y es más negocio para ellos que beneficio para el cliente", dijo Elías González, vecino de la colonia Altamira, en Zapopan, "yo mejor traigo mis bolsas cuando puedo y las utilizo, las reciclo".