Esta mañana los cinco agentes del Programa Banquetas Libres de la Dirección de Movilidad del Ayuntamiento de Guadalajara recibieron nuevas sillas de ruedas que les ayudarán a realizar su trabajo de una manera más cómoda.
El programa inició en octubre de 2015 con 30 agentes. Hoy son 110, cinco de ellos con discapacidad motora.
Una de sus integrantes es Érika Belén, quien a lo largo de casi tres años de trabajar en este programa señala que poco a poco se han ganado el respeto de los automovilistas, quienes también ya muestran más conciencia al momento de estacionar sus vehículos en lugares adecuados.
"En un principio sí se desconcertaba porque no sabían si teníamos autoridad, pero con el paso del tiempo la gente se fue acostumbrando. De hecho nosotros de alguna manera venimos a hacer esa cara de banquetas libres, el hecho de ver una persona con discapacidad que levanta una infracción en un lugar que no se respeta, ejemplo una rampa o un cajón de discapacitado. Sí, ya hay más respeto, ya nos reconocen, yo he contado con la felicitación de algunas personas en la calle que reconoce mi trabajo y eso me hace sentir una satisfacción enorme".
El camino para ganarse ese respeto no ha sido fácil. Los agentes con discapacidad han sido objeto de agresiones y reportes falsos por parte de automovilistas que fueron multados por haberse estacionado de forma inadecuada, relata Gonzalo Campos, otro integrante del programa.
"Lo peor es que después de que no podemos hacer nada y se les hace la multa, nos empiezan a agredir verbalmente relacionado con extra discapacidad, y algo peor es que van a la dependencia, dicen mentiras, reportándonos que somos prepotentes, que les pedimos dinero y una serie de mentiras por tal de salvarse de una multa".
Los Agentes de Movilidad tienen atribución para aplicar diversas sanciones por violaciones al Reglamento de Estacionamiento, sin embargo, las concernientes al programa Banquetas Libres son: invasión de banquetas, andadores peatonales, ciclovías, rampas, cajones para personas con discapacidad, bomberos y exclusivos.
El costo por cada silla de ruedas entregada fue 25 mil 392 pesos. Cada unidad cuenta con modificaciones específicas, es decir, están hechas a las necesidades de los agentes.