Por unanimidad de 476 votos, el pasado 2 de octubre se aprobó en la Cámara de Diputados una reforma de "urgente resolución" a la Ley Federal del Trabajo, denominada "Ley Silla", para obligar a los patrones a proveer de sillas a sus trabajadores con la finalidad de que tengan descansos en su jornada laboral.
Habla al respecto el académico Guido Adalberto Bugarín Torres, presidente de la Academia de Derecho Laboral del CUCSH "Se le denomina ley silla por los efectos pero hay que aclarar este punto, lo que nosotros estamos viendo es una adición al artículo 132 y 133, en esos artículos se establece la reforma que los patrones tienen la obligación de conceder obligatoriamente a los trabajadores que tengan un espacio dentro de su jornada para efecto de que puedan descansar obviamente en una silla".
La medida fue enviada al Senado de la República para continuar con el proceso legislativo. Esta legislación establece que las empresas tendrán un plazo de 12 meses para hacer los ajustes necesarios para acatar la ley, en caso de no hacerlo habrá sanciones económicas.
"Se va a reformar también el artículo 422 y 423 de la Ley Federal del Trabajo que hablan de las sanciones y sanciones económicas que van la más pequeña de 250 hasta 2 mil 500 unidades de medida de actualización conocidas como UMAS, estamos hablando de que hay sanciones económicas y si el patrón insiste después de haber sido supervisado entonces puede que la inspección del trabajo lleve a juicio al patrón".
De acuerdo con la exposición de la iniciativa, en muchos ámbitos laborales se impone a las personas trabajadoras la obligación de permanecer de pie durante jornadas excesivas de trabajo, a veces mayores a 48 horas a la semana, además de existir explotación, acoso y discriminación laboral.
El aspecto más noble y humano de la reforma es prevenir riesgos asociados con permanecer de pie por periodos extensos. De acuerdo con una investigación de la Revista Americana de Epidemiología, las personas trabajadoras que laboran todo el tiempo de pie son mayormente susceptibles a un infarto cardíaco o a sufrir un derrame cerebral, los cuales tienen que ver con el retorno venoso, es decir, la tasa de flujo sanguíneo de vuelta al corazón.
"Creo que es muy válido porque todo trabajador merece un descanso, creo que el horario a veces es muy excesivo, mínimo son ocho horas diarias, estar en una misma posición en el trabajo que a veces es demandante hacerlo de pie, y conlleva muchas enfermedades después, como tal es un apoyo para los trabajadores para que tengan un descanso", comentó Marisol.
"El Seguro Social tiene registrado un promedio de treinta mil visitas a las diferentes clínicas del Seguro Social por problemas de trabajadores exclusivamente que prestan servicio en forma horizontal de pie, yo no creo que es un perjuicio, más bien será un beneficio obviamente al patrón le va a generar un conflicto de inversión porque tendrá que ajustar los espacios laborales para poder disponer de un lugar cómodo, higiénico, ventilado que le permita al trabajador realmente descansar", reveló el académico.
Si bien la Ley Silla ya recibió el respaldo de la Cámara de Diputados, todavía falta un paso importante: la revisión y aprobación por parte del Senado, lo siguiente será que la reforma sea promulgada y publicada en el Diario Oficial de la Federación. A partir de entonces, la nueva normativa será oficial y podrá comenzar a aplicarse, las empresas contarán con un plazo de 180 días contados a partir de la entrada en vigor del decreto para adecuar su normativa interna para dar cumplimiento a lo establecido.