Cientos de locales en el Centro de Guadalajara lucen con las cortinas abajo o en renta, ante la caída en ventas que han enfrentado los comercios desde 2015 con el comienzo de las obras de la Línea 3 del Tren Ligero. En el caso de la Peluquería Alex, ubicada en Paseo Alcalde, los nuevos clientes cada vez son menos, a pesar de que la vialidad ya fue reabierta tras su remodelación.
"Desde el 2015 estamos tal vez sobreviviendo nada más por obra de Dios, la misma clientela de nosotros afortunadamente nos siguió, por eso hemos logrado sobrevivir, porque si no yo creo que de otra manera nos hubiera pasado como en la mayoría de los negocios, que quebraron", lamentó la peluquera profesional.
La farmacia Toledo tiene 70 años ofreciendo medicamentos en la colonia Centro, y ha soportado estos años "de vacas flacas", pero casi cien comercios de los alrededores han cerrado, advierte el propietario, Rubén Toledo, quien pide más difusión sobre la renovación del Paseo Alcalde.
"Me voy caminando de aquí a Catedral y el otro día conté 95 cortinas cerradas; el Paseo Alcalde está muy bonito, nada más que la gente sepa que ya está bonito y que ya puede venir y pueden pasar los automóviles, porque antes no podían pasar", comentó el farmacéutico.
Y más que apoyos económicos o descuentos, lo que comerciantes de la zona esperan es que las autoridades metan el acelerador para arrancar con el servicio del Tren Ligero, lo que reactivaría definitivamente la zona, considera Gloria Navarro, comerciante desde hace más de 40 años en Uniformes Amparo.
"Aunque ya esté abierto, de todos modos no hay ventas como antes, esperemos que ahora que ya esté funcionando el Tren, haya un poco más de ventas, que nos vaya a beneficiar la estación de la calle Manuel Acuña".
El poco flujo de personas por las tardes en la zona Centro no sólo ha traído problemas por la falta de clientes, sino porque facilitan los robos, otro problema que pega en el bolsillo a los comerciantes.