Comedores comunitarios: un refugio contra el hambre durante la pandemia

La sociedad civil organizada ha reactivado negocios no esenciales para transformarlos en un refugio contra el hambre para la gente más necesitada.

Es lo que ocurrió con el antro Dembow, que en unas semanas pasó de ser un lugar de reunión y fiesta, un giro no esencial en estos tiempos de pandemia, a convertirse en un comedor comunitario que beneficia ya a más de 200 personas al día con alimentos preparados, explica Olegario Hernández Paniagua.

"Estamos cumpliendo dos semanas y comenzó llegando alrededor de 50, 60 personas, y desde ayer ya estamos teniendo arriba de 200 personas que vienen por un plato de comida; todos los días es un guisado diferente, por ejemplo, hoy sí tuvimos prácticamente menú, porque nos proporcionaron guisados pero de tanta gente que está viniendo, se termina, tuvimos que hacer atún, tuvimos que hacer hot-dogs, lo que tenemos a la mano para seguir proveyendo la comida; todo se obtiene con donaciones, de la misma gente", aseguró.

Entre las personas beneficiadas, hay quienes se desplazan desde otros municipios, ante las dificultades económicas y el hambre que aprieta durante estos días de emergencia sanitaria.

"Me dieron atún con tostaditas, con cebollita y jitomate picado, y mire, al último me dieron despensa... mucho económicamente, ahorita como está la situación, que hay veces que no le dan a uno trabajo en algún lado por como está la situación", comentó Martha Beatriz Rodríguez Altamirano, vecina del barrio de Mezquitán, quien también recibió algo de despensa para la semana.

"Gracias a Dios sí alcancé a comer, unos hot-dogs muy ricos... no había desayunado; siempre está pesadita la situación, que Dios se los pague, que haya más oportunidad de dar y muchas gracias", agradeció Martín López, vecino de la colonia El Mirador, tras salir del antro convertido en centro solidario.

Este comedor comunitario se ubica sobre avenida La Paz número 2133, esquina Marsella, en la zona de Chapultepec, y funciona como comedor comunitario de 10 a 4 de la tarde.

Otra iniciativa es la arrancada por la fonda La Delgadina, que tuvo que cerrar por la pandemia desde el 20 de marzo, pero las 12 familias que viven del restaurante ahora preparan comida para personas en situación de calle atendidas en el albergue Mamá Lupita.

"Llevar comida a los más necesitados, por eso hemos contactado a casa hogar Mamá Pita, es una casa hogar que se encuentra en la avenida República, colonia La Perla, que tiene necesidades muy diversas ¿qué queremos lograr? Queremos ayudar a conseguir por lo menos las 300 comidas de la gente que ahí va con ellos todos los días", invita a participar en un vídeo difundido en redes sociales el propietario de La Delgadina, Antonio González.

La comida completa que prepara La Delgadina cuesta 50 pesos, la cual es regalada a las personas en situación de calle que atiende Mamá Lupita.

Se puede apoyar contactando a La Delgadina Fonda Urbana en sus redes sociales o en su local sobre avenida Vallarta 3168.

También hay otros esfuerzos sociales como el comedor comunitario La Divina Misericordia, en la calle Insurgentes del centro tapatío, a unas cuadras de Plaza de los Mariachis, que es apoyado por la comunidad hebrea y por Cáritas de la Arquidiócesis de Guadalajara.

O iniciativas oficiales como la del Ayuntamiento de Zapopan, que ofrece alimentos para 500 personas en siete Centros de Desarrollo Comunitario, en las zonas de Santa Lucía, Villa Hermosa, Lomas de Tabachines, Arenales Tapatíos, Parques del Auditorio, Santa Ana Tepetitlán y Villa de Guadalupe.