Compras a crédito cuestan más del doble; la realidad financiera
Adquirir bienes a crédito se ha convertido en la manera más sencilla y casi necesaria de la población para crecer su patrimonio; sin embargo, la realidad financiera del país lleva a los compradores a pagar hasta más del doble del valor real de los productos tras las altas tasas de interés.
Créditos inmobiliarios, automotrices, dinero, ropa y aparatos eléctricos son parte de los artículos más socorridos por la población bajo esta modalidad al carecer de la solvencia económica para pagarlos de contado, a pesar de que realidad de pago es otra.
Antonio Sánchez, académico del Departamento de Contabilidad de la Universidad de Guadalajara (UdeG) reconoció que el país se encuentra en un riesgo financiero alto, situación que ha llevado a las instituciones bancarias y tiendas a poner intereses altos ante el análisis de tres circunstancias:
ANALISTAS CREDITICIOS:
- Nivel de cumplimiento e incumplimiento de pago
- Certidumbre o incertidumbre financiera
- Seguridad jurídica de un estado
"Si yo quisiera establecerme en Jalisco como empresa y yo solicito líneas de crédito en el extranjero, elaboración una calificación de riesgo financiero por país, bajo este entorno como se encuentro el país, nuestro nivel de calificación es de alto riesgo por lo tanto, si quieres que te preste, la condición crediticia o el interés que te voy a cobrar es más alto a países de mayor seguridad financiera. ¿Qué es lo que hace la institución financiera?, bueno, si te voy a prestar ocupo avales, ocupo garantías, ocupo un costo alto y este es mi costo; muy alto y la gente para la gente es caro pero por el entorno jurídico, financiero, fiscal y sobre todo de seguridad que otorga el estado".
Jorge Rodríguez, quien ha adquirido tres créditos fuertes hasta el momento, admitió que ha sido la forma de hacerse de patrimonio a pesar de terminar pagando casi del triple del valor.
"En el transcurso de mi vida he sacado tres créditos hipotecarios y uno automotivo (...) todos terminando pagando de más y en el último crédito pagué como un 180% más al final de los 20 años de crédito que me están dando. Como no tengo el dinero de golpe para pagar la casa de contado, tengo que utilizar los créditos y así es como he podido hacerme de mis propiedades".
"Una casa habitación o crédito hipotecario garantiza con el inmueble, pero sobretodo los bancos, le piden que sea de determinado monto para que cuando se invierta en caso de no poder recuperar esas deuda, el monto de ese activo les ayude a recuperar su monto de inversión. A veces acaba pagando dos veces el importe que le prestaron", ejemplificó el académico.
El académico reconoció que los intereses cada vez son más altos, por lo que se recomienda únicamente adquirir deudas de máximo el 25% del ingreso bruto mensual de una persona.
