Denisse tiene 13 años y a los 11 años y medio fue diagnosticada con Leucemia; desde entonces junto con Araceli, su madre y toda su familia, lucha contra esta enfermedad que les ha cambiado completamente la vida.
Actualmente se atiende en el Hospital General de Occidente, mismo en el que se le diagnosticó el cáncer, luego de empezar con una fiebre constante y tras varios estudios que resultaron en un proceso difícil, aceptó Araceli Hernéndez, madre de la menor.
"Ella comenzó con fiebre. El único síntoma que ella tenía era fiebre y la llevamos con su pediatra habitual, pero llegó el punto en el que dijo no sé de dónde viene esa fiebre, le manda a hacer análisis de sangre y ya ahí me dijo que tiene como anemia, pero que necesitaba un estudio más especializado. Es entonces cuando me recomienda que vayamos al hospital de Zoquipan, me dijo que fuera para allá porque había especialistas. Nos fuimos una madrugada a Zoquipan, la niña igual llevaba fiebre, ya ahí empezaron a revisar los análisis que llevaba y todo. Fueron un par de días difíciles, puesto que no nos decían nada, ni siquiera una idea de a dónde era, porque la niña no tenía otro síntoma (...) analizaron la médula y sí, paso de unos días, nos dijeron que sí, que la niña tenía Leucemia".
Aracelí aseguró que tras recibir la noticia, su vida y la de toda su familia cambió radicalmente, pues dejaron sus trabajos para pasar días en el hospital durante el tratamiento de Denisse, quien a pesar de los cambios, lucha con la mejor actitud.
"Uy no, enormemente. Enorme, porque realmente al principio tuvimos que dejar de trabajar para poder estar con ella, pasábamos mucho tiempo en el hospital porque la internaban y así, pues si muy pesado, estar lejos de la familia, de mi otra hija, muy difícil. Económicamente también es costoso; digo, la verdad todo nos ofrecen el hospital, el medicamento, no nos hace falta nada, pero si de repente para los traslados, la comida de ella es un poquito más especial, entonces si son un poquito de gastos más fuertes, pero no ha sido imposible".
"Ella tiene mucha actitud, eso le ha ayudado bastante. Pues sí es complicado porque dejó de ir a la escuela; entonces estar en casa todo el día y pues no ver a sus amigos un poquito complicado. No la he visto deprimida en ese aspecto, no, pero pues raro para ella", dijo Araceli.
A pesar de que hasta el momento, no se han enfrentado a la falta radical de medicamentos como en otros casos, Aracelí aseguró que se han acercado a las organizaciones, quienes les han ayudado en esta batalla.
"Es tener verdaderamente unos ángeles en la tierra, de verdad que sí. Siempre al pendiente de los niños, vamos, no permiten que les falte nada en medicamentos".
Araceli pidió a la población tener empatía con esta lucha al acercarse a ayudar de alguna forma a las asociaciones, pues aseguró que se necesita de apoyo para evitar que estos niños sigan sin su medicamento.