Alejandro N, quien hace ocho días fue encontrado penalmente responsable por el delito de feminicidio en grado de tentativa y robo calificado en agravio de su ex esposa Sandra Paola García, fue sentenciado a 38 años 11 meses y 16 días de prisión.
Marisol Navarro, asesora jurídica de Sandra Paola, señaló que de forma unánime las tres juezas integrantes del tribunal de enjuiciamiento, dictaron además de la pena de prisión una multa de $60,000 y 135 mil pesos como reparación del daño. "El tribunal que conocía de la causa deliberó por unanimidad, es decir, que las tres juezas fueron concordantes en cuanto a que la pena a imponer por los delitos de tentativa de feminicidio y robo calificado que ya se le habían impuesto al sentenciado, será para una pena de 38 años, 11 meses y 16 días. Esto por lo que ve a la pena, por lo que ve a la reparación del daño, se logró acreditar algunos de los gastos que ha erogado la víctima"
La litigante agregó que por medio de el juez de ejecución de pena, podrán comprobarse más gastos erogados por la víctima en su proceso de rehabilitación. "Sin embargo, quedan a salvo sus derechos para que en vía incidental, en ejecución de sentencia, pues se puedan comprobar los demás gastos, puesto que recordemos que al hablar de una reparación del daño integral, pues muchos de ellos es imposible establecer un monto, entre ellos pues un proyecto de vida que lo tenía Sandra Paola, lo que ella deja de percibir por el hecho de no estar elaborando, por poner algún ejemplo de ello".
Visiblemente tranquila y satisfecha con la sentencia que recibió su ex esposo, Sandra Paola señaló que a partir de hoy podrá retomar su vida con tranquilidad al saber que Alejandro pasará casi 39 años en la cárcel. "Sí, ha sido un proceso muy largo, pero ya al fin siento que se hizo justicia, siento que yo hubiera querido que fuera cadena perpetua como me dice mi hijo, pero no existe eso, pero me siento en paz con que se va a quedar 38 años adentro".
Agregó que a partir de hoy se enfocará en su tratamiento de rehabilitación para recuperar la movilidad de su mano derecha y el habla de forma más fluida. "Claro, claro, porque era un peligro para toda la sociedad, no solo para mí, mi mamá y mis hijos, pero sí, ya espero dar carpetazo a este episodio tan feo de mi vida y empezar a planear hacia el futuro".
La agresión ocurrió el 4 de febrero del año pasado dentro de la casa de Sandra Paola en la Colonia Santa Ana Tepetitlán, en Zapopan. Ese día Alejandro llegó a la casa de Sandra Paola y la golpeó hasta dejarla inconsciente. Inmediatamente después se escapó. Un día después fue localizado y detenido en un hospital privado, donde se encontraba internado debido a que intentó quitarse la vida.