El 8 de marzo, las calles de Guadalajara se tiñeron de morado en señal de protesta y justicia para todas las mujeres que han sido asesinadas, motivo que llevó a más de 35 mil mujeres a unirse a la marcha en el marco del Día Internacional de la Mujer.
Al unísono de: ¡Ni una más!, ¡Justicia!, entre otras consignas y el puño en el aire, el contingente salió en punto de las 17:30 horas de Plaza Universidad, sitio donde previo a la manifestación se tuvieron algunos talleres. El Destino era la Glorieta de los Desaparecidos
En el contingente venía la familia de Imelda Virgen, una joven que fue asesinada hace siete años y que sigue sin recibir justicia.
"Hace siete años asesinaron a mi hermana, fue uno de los primeros feminicidios después de que se tipificó el delito aquí en Jalisco, y a casi ocho años no tenemos ninguna sentencia firme, condenatoria. Vamos por la segunda sentencia que ya se dictó y está ahorita en espera en el Supremo Tribunal de Justicia (...) es como un termómetro no, esto indica que ya no se puede seguir más", dijo Sofía Virgen, hermana de Imelda.
También hubo mujeres jóvenes y adultas que decidieron unirse a este movimiento pues reiteraron que la violencia contra las mujeres se está saliendo de las manos y exigen un lugar más seguro.
"Yo creo que los jóvenes están pidiendo ayuda. Yo jamás viví este nivel de violencia de niña, ni de joven, y ahorita los veo a ellos, pequeños, niñas, niños, mujeres y digo que están pidiendo ayuda y vamos a dárselas porque es una causa justa", resaltó la señora Silvia.
Las participantes recibieron el apoyo de quienes las esperaban a lo largo de la Avenida Juárez y Chapultepec, donde el contingente tomó fuerza, para terminar con el pronunciamiento de familiares que siguen en la búsqueda de sus familiares o de justicia.
Las asistentes aseguraron sumarse al paro nacional de este 9 de marzo y piden a las autoridades que este hecho los haga reflexionar sobre la seguridad del estado y del país.