Fortalecen brigadas de sanidad para revertir daño por tala ilegal

Aunque el tema de la tala clandestina de bosques es un problema que le compete al Gobierno Federal, por parte del Gobierno de Jalisco hay programas en marcha que buscan revertir los daños forestales que ocasiona esta actividad criminal.

El director del Fideicomiso para la Administración del Programa de Desarrollo Forestal del Estado (FIPRODEFO), Arturo Pizano Portillo, explica que la tala clandestina tiene impactos ambientales más allá de los árboles que son desmontados, como la propagación de plagas.

"Uno de los efectos de la tala clandestina es precisamente que se generan plagas y enfermedades, porque precisamente la tala clandestina se da sobre los árboles o los individuos más buenos que pueden rendir; si van a cometer el delito, lo hacen sobre lo que da mejor rendimiento productivo, entonces al quitar los árboles más fuertes privan la posibilidad de que semillen y lo que permanece en el bosque son los árboles chuecos, los que están mal, los que tenían una enfermedad previa y precisamente por eso no se lo llevaron, y lo único que ocurre es que ese bicho o la plaga que tengan se propague más fácilmente entre los demás que quedan", señala.

Un proyecto que puede ayudar a revertir este impacto de la tala ilegal es la creación de brigadas forestales de sanidad. 

"Está enfocado básicamente a la integración de brigadas de sanidad para atender un problema fuerte de enfermedades y plagas forestales que está pasando el estado de Jalisco actualmente por acción de la tala clandestina, que va a descremar lo más bueno y lo malo lo deja, pero lo malo es lo que las plaguitas encuentran como lo más accesible para desarrollarse; el cambio climático también ha sido un factor que ha incidido en una propagación de plagas y enfermedades bastante fuerte en nuestro estado que tenemos que empezar a atender", reconoce Pizano Portillo.

Este año, el fideicomiso apoyará con recursos a seis brigadas que ayudarán a sanear alrededor de seis mil hectáreas de bosque afectado por plagas, en parte por la actividad de tala ilegal, en las regiones de la Sierra Occidental, la región Norte, la Sierra de Amula y el Sur-Sureste del Estado. A través de un subsidio, el Gobierno de Jalisco financia las jornadas de trabajo de los cinco brigadistas que integran cada equipo, quienes son acompañados por un técnico forestal que guía las labores de saneamiento.

Pero en el fondo, el reto más importante frente a la tala clandestina es fortalecer a los ejidos y comunidades para que se apropien del territorio y eviten la entrada de la actividad ilegal.

"Ahorita, por ejemplo, un reto importante es lograr que ejidos y comunidades precisamente se apropien muy fuertemente de su sistema productivo forestal para incrementar la presencia en el campo o en el bosque y reducir la probabilidad de que sean sujetos de aprovechamiento ilegal".

El FIPRODEFO apoyará con recursos este año a proyectos en más de 70 municipios, que consisten, además de las seis brigadas de sanidad, en reforestaciones, proyectos de conservación de especies clave, la creación de viveros rústicos o proyectos de forraje en el bosque, entre otras iniciativas locales en torno a los bosques de Jalisco.

Sin embargo, hace falta incrementar el presupuesto, pues hubo casi 600 proyectos que solicitaron recursos del Fideicomiso y los 18 millones de pesos destinados este año sólo alcanzaron para los 226 proyectos que presentaron mejores condiciones, aunque si la bolsa tuviera alrededor de 25 millones de pesos, se hubiera podido apoyar a todas las iniciativas que buscan aprovechar de forma sustentable y cuidar los bosques de Jalisco.