Dos padres de familia, quienes denuncian haber sido víctimas de violencia vicaria, acudieron esta mañana al Registro Civil número 1 ubicado en el Mercado Corona para solicitar su cambio de identidad de género y convertirse legalmente en mujeres.
Ellos forman parte de una agrupación que demanda que la legislación sobre la violencia vicaria se sancione en ambos géneros, tanto hombres como mujeres, porque acusan que el marco jurídico creado hasta el momento, solo está diseñado para beneficiar a mujeres.
Las personas que cambiaron de género son David Carrillo Macías y Rodrigo Arreola, quienes han peleado la custodia de sus hijos. Acusan que las leyes que atienden la violencia de género son inequitativas. "No todos los hombres son malos, ni todas las mujeres son buenas. Y eso es una realidad a la cual nos hemos enfrentado y que conocemos de viva voz por muchos niños que están sufriendo y que están creciendo sin una figura paterna y que a los juzgados, a las autoridades, es algo que les viene valiendo un cacahuate", expresó Rodrigo Arreola, víctima de violencia vicaria.
La doctora Christopher Montenegro, quien legalmente es una mujer, señaló que cada vez más hombres han tenido que recurrir a cambiarse de genero para tener un trato igualitario en tribunales, particularmente en temas de materia familiar. "Esta ley se empieza por el 2008, hasta el año pasado en Jalisco solamente había 23 personas. A partir de que empezamos a hacer este tipo de estrategias, en Jalisco van dos mil 023 personas en lo que va el año, dos mil personas más se han cambiado", señaló la doctora Montenegro.
La doctora Tzitziki Gómez, comisionada federal de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, señaló que el tema de la violencia vicaria no debe velar por ver si son los hombres y las mujeres quienes tienen la razón, sino que se vea por el bienestar de los menores. "Lo principal que estamos nosotros peleando es artículo segundo y cuarto constitucional que nos habla. El interés superior del hombre. Por lo tanto, este tipo de ley lo único que dejó como resultado es que ahora los hombres cambien de género. ¿Para qué? Es que la lucha no es con las mujeres. La lucha es para poder rescatar a sus hijos", afirmó la académica.
El trámite para cambiar de género les tomó 20 minutos y 380 pesos para la eliminación del registro previo. La próxima semana serán sujetos a constancia.
Al convertirse legalmente en mujeres, tendrían derecho no sólo a un trato de justicia igualitaria en materia de violencia vicaria o familiar, sino también en caso de muerte con indicios de violencia, tendrían que ser investigados bajo protocolo de feminicidio o serían beneficiarios de programas sociales destinados a mujeres.