Aunque los teléfonos celulares pueden ayudar a mantenernos en contacto con miles de personas y a tener acceso a información, muchos usuarios de smartphones los utilizan de forma excesiva y llegan a generar una auténtica dependencia.
Habla el doctor y profesor Francisco José Gutiérrez Rodríguez, investigador de la UdeG "debemos de utilizar para nuestro beneficio todo tipo de desarrollo científico, tecnológico, comunicacional sin embargo debemos saber poner límites en horarios, en momentos en que los consumo y que puede afectar mis diferentes áreas de vida".
El especialista señala que dicha dependencia a los smartphones, puede dar pie al surgimiento de la "nomofobia", que consiste en el miedo irracional a no tener el celular o a estar incomunicado a internet. "somatización, taquicardia, sudoración, tan solo en pensar que me quedé desconectado, sin pila, sin internet".
"La verdad si me ha pasado y si se siente una desesperación, llega uno acostumbrarse a traerlo y se siente uno incomunicado", dice Viviana.
La nomofobia es más frecuente en personas de 13 a 35 años, que son quienes más utilizan el celular según la Asociación Psicoanalítica Mexicana.
La asociación estima que en México un 33% de los usuarios de Smartphone tienen nomofobia. "El sujeto puede ser que no se entere que ha pasado en los último momentos y lleguen a considerarlo como una tragedia".
"Mi hermana sufre una adicción por el celular, ahora la vamos a llevar a psicología para que tenga tratamiento por lo mismo del celular, se desvela por los juegos, todo el tiempo quiere estar jugando en el celul.ar, noche, madrugada, no come nomás por estar en el celular". detalló Sandra
SÍNTOMAS DE NOMOFOBIA
"Crea bastantes afecciones en diferentes sentidos, tiene que estar con esa necesidad creada de estar con lo último no importa que no exista el dinero para tener otros satisfactores, otros bienes, otros servicios, sino el tener el artefacto que aveces tiene de vigencia un año y ya se busca tener la siguiente herramienta tecnológica, si crea bastantes afecciones en diferentes sentidos".
Sin duda, para muchas personas el celular ha llegado a ser una extensión de su persona y su identidad, a tal punto que han desarrollado una auténtica dependencia emocional hacia el aparato, pues se ha convertido en el custodio de sus experiencias más significativas y en su llave más importante de conexión con el mundo.