Durante al menos seis años, ejidatarios de Tequila han exigido el cierre del basurero instalado en el municipio y que es operado por la empresa Rellenos Sanitarios de México.
Al respecto, la Secretaría del Medio Ambiente y Desarrollo Territorial (SEMADET) inspeccionó el sitio y determinó que debe cerrar sus actividades, pues únicamente tiene autorización para operar en una zona de 4 hectáreas y ya alcanzó las 7, entre otras violaciones a la norma que detalla el titular de la dependencia.
"Tenemos muestras de cómo zonas fuera del área de disposición fueron utilizadas para quemar llantas, productos, o sea, un mal manejo de un sitio de disposición final tiene impactos negativos en la contaminación, ya sea del aire o del agua en el entorno inmediato", asegura Sergio Graf Montero, titular de SEMADET, "cuando hicimos la inspección tú puedes ver que en una superficie muy amplia hay basura en el entorno, afectando al ganado, la población, o sea, el daño ambiental es de diferente índole".
Sin embargo, la autoridad no puede clausurar porque existe una suspensión judicial a favor de la empresa, que asegura es irregular la determinación de la autoridad ambiental, pues toma en cuenta como parte de su terreno un basurero antiguo que no depende de la empresa.
En tanto, Rellenos Sanitarios de México acusa que el Ayuntamiento de Tequila dejó de pagar a la empresa por la recolección desde diciembre de 2020, por lo que esta semana dejó de prestar el servicio y es directamente el municipio quien opera y dispone los residuos en un sitio sin autorización.
El municipio también retiró la licencia municipal de operación al basurero, pero gracias a un amparo la empresa sigue operando, aunque las autoridades y ejidatarios no permiten el ingreso de camiones privados, por lo que la empresa dejó de percibir ingresos.
Mientras tanto, los ejidatarios ya presentaron una queja ante Derechos Humanos por las afectaciones y porque aseguran que el Ejido jamás autorizó en una asamblea que se instale un basurero en sus terrenos. El organismo pide vigilancia para evitar la contaminación.
"Que no obstante que pueda existir a lo mejor una suspensión a favor de la empresa, que de todos modos las autoridades estatales, como es Proepa y Semadet, no dejen de llevar a cabo la vigilancia, en las medidas de sus posibilidades, y la inspección para que el uso y manejo de los residuos sólidos que estén dando sea el adecuado y no se vaya a contaminar", explica el Tercer Visitador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos Jalisco, Aldo Reynoso Cervantes.
El relleno sanitario privado de Tequila es el más grande de la región Valles, misma zona en la que la empresa Caabsa intentó este año construir el nuevo basurero metropolitano, en el municipio de Tala, al que los habitantes se opusieron hasta que el Gobierno de Jalisco prometió suspender la obra.