La seguridad en la colonia Olímpica, en Guadalajara, no ha mejorado a un año del asesinato del estudiante de la preparatoria de Tonalá de la UdeG, Francisco Álvarez Quezada, de 17 años, quien fue privado de la vida de un disparo al resistirse a un asalto.
A decir de los entrevistados por Meganoticias los robos son constantes en esta colonia, sin que las autoridades hagan algo por resolver este problema.
Catalina Guerrero explica: "Desgraciadamente yo desearía decirle que ha mejorado, pero no es así, al contrario, creo que he empeorado porque se dan muy seguido los asaltos en muchachas que vienen de su escuela y que ya es muy indispensable, no sólo no es un lujo el celular. Hace dos o tres días, a dos muchachitas las quitaron su celular con pistola en mano".
Otro caso es el de Antonio Mercado, quien comentó que su hijo fue herido de bala en una mano en un atraco.
"A cada rato, celulares, asaltos en los pasillos, eso no ha cambiado con todo respeto. A mí hijo lo asaltaron y le dispararon en la mano y afuera dice 'te estamos grabando las 24 horas del día', yo no veo un cambio real".
La señora Patricia Martín también ha sido víctima de los delincuentes. En una ocasión se metieron a robar a su casa y en otra los ladrones trataron de ingresar, pero no pudieron.
"A mí me han asaltado en mi casa. Una vez entraron por la azotea en una salida de vacaciones, y pues el parque se presta mucho para que las personas estén observando la salida y entrada de la gente y establezcan una forma de robar. En otra ocasión trataron de forzar las cerraduras de afuera, nada más que no pudieron".
Esta situación ha obligado a los colonos a organizarse para tratar de disminuir los robos, muestra de ello son las placas con la leyenda vecinos en alerta que han colocado en sus viviendas.