La llegada de Joe Biden a la presidencia de Estados Unidos generó esperanzas en miles de personas centroamericanas que atraviesan México rumbo al norte para mejorar sus condiciones económicas, sociales y de seguridad, por lo que se triplicó la atención en la casa del migrante El Refugio, en el Cerro del Cuatro, uno de los principales centros de apoyo en Guadalajara.
"Desde que se supo que Donald Trump perdió la elección y ganó este señor Biden, parece como que la noticia fue un incentivo muy fuerte para los migrantes de Centroamérica, que ahorita está pasando como el triple de los que estaban pasando antes de las elecciones", explica.
Antes de la elección no recibían más de 10 migrantes al día, hoy llegan 30 en promedio y algunos días hasta 50. Uno de ellos es Aarón, hondureño de 22 años que dejó su país para buscar un mejor futuro, ante la inseguridad, la pobreza y los huracanes que en noviembre azotaron su país y se llevaron el patrimonio familiar.
"Ahí perdimos todo, nuestras cosas, lo más valioso que con esfuerzo lo haces ahí en Honduras, imagínate, tanto tiempo que te ha costado comprarte tus cosas y de un de repente quedas en la nada, en la calle, pues está bien fea la situación", recuerda.
La familia de Aarón es el motor que lo llevó a migrar: "quiero mandarles hacer una casita, un negocio, un carrito, con el tiempo, y por ellos ando acá, por mi familia".
Pero para el padre Alberto, el cambio en la política migratoria estadounidense sólo es en el discurso. Trump exigió a México contener la migración con la amenaza de aranceles; con Biden, los migrantes son la moneda de cambio para enviar vacunas al país.
"El migrante se ha convertido en una mercancía hasta para nuestro gobierno federal, tú detenme a los migrantes, yo te mando las vacunas, desafortunadamente esa es la situación", lamentó.
Mientras tanto, el albergue sale adelante gracias a donativos particulares y apoyo de la iglesia; las autoridades, ausentes.
"Desafortunadamente ni el gobierno municipal, ni el estatal, diría que ni el federal, tampoco hacen nada por los migrantes y obviamente no nos apoyan en nada", reafirma el sacerdote.
Pese al olvido oficial, El Refugio es un oasis para Aarón y su primo, quienes salieron de La Ceiba, al norte de Honduras, hace mes y medio. Van a la mitad del camino y el albergue les brinda descanso y alimentos para recargar fuerzas frente a los peligros, inseguridad, lesiones por caer del tren "La Bestia" y mucha sed que han enfrentado en el camino con el objetivo en mente de una vida mejor.
"Nos tocaron peligros, montaña tras montaña, 18 días caminé con mi primo; tuvimos dos asaltos, aguantamos hambre en las vías, sin agua, imagínate, sin agua, sin comida, el agua te ayuda, imagínate sin agua, bien resecos? dormíamos en el monte, con las culebras", recuerda Aarón, quien tiene la esperanza de ya haber pasado la parte de más difícil del trayecto.
Arranca 2021 con más del doble de migrantes detenidos en EEUU
Este 2021 arrancó como el año con el mayor registro de detenciones de migrantes por parte de la patrulla fronteriza de Estados Unidos.
Sólo durante enero y febrero de este año fueron detectadas más de 178 mil personas atravesando la frontera entre México y Estados Unidos, más del doble de las detenidas en 2020, un 144 por ciento más considerando los mismos meses del año pasado, cuando se registraron poco más de 73 mil migrantes.
En el arranque de año de 2018, durante enero y febrero fueron retenidas 71,810 personas. Para 2019 la cifra subió 116,634 migrantes. Durante enero y febrero de 2020, con la pandemia, el registro bajó a 73,170, pero este 2021 remontó con creces hasta los 178,883 migrantes sólo durante los primeros dos meses del año.
Prácticamente la mitad de las personas detenidas por migración estadounidense son mexicanas, seguidas por originarias de Guatemala, Honduras y El Salvador, principalmente.
Este año, la mayoría de las personas son adultas, aunque van más de 29 mil menores de edad sin acompañamiento. En 2019, la mayor parte de las detenciones eran contra familias completas, debido a las grandes caravanas migrantes que lograron atravesar México rumbo a Estados Unidos, un fenómeno que ha sido contenido tanto por México como por países centroamericanos.