El SIAPA recortó en mil litros al mes la cuota básica gratuita que mantenía para garantizar el derecho humano al agua.
Por lo menos desde el 2012, el Sistema Intermunicipal de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA) decidió no cobrar el consumo de agua que va entre los 0 y los 6 mil litros de líquido al mes, como una medida para garantizar que cualquier persona tenga acceso a una cantidad mínima sin que el dinero sea un obstáculo, y es a partir de los siete mil litros que comienza a cobrar, como señala la tarifa este 2020.
Sin embargo, en la política tarifaria para 2021 se registró un retroceso, al bajar esa cuota a los 5 mil litros al mes.
Esta decisión viola los derechos humanos de la gente de la Zona Metropolitana de Guadalajara, pues según el Artículo 1 de la Constitución Mexicana, que reconoce el derecho al agua, los derechos humanos deben ser progresivos y no retroceder, advierte la integrante del Instituto Mexicano de Desarrollo Comunitario, María González.
"Es una medida regresiva y cuando hablamos del derecho humano al agua potable y el saneamiento, el SIAPA debe mantener, pero no puede retroceder, los derechos humanos son progresivos, es decir, tener mejores condiciones pero nunca retroceder, entonces lo que están haciendo es una medida en la que ese mínimo vital o esa tarifa subsidiada la están regresando, entonces es una afectación, por supuesto, a la gente, y hay un incumplimiento, viola derechos humanos", señala la activista.
En el caso de las tarifas para personas en situación de pobreza, se aumentó de 6 a 7 mil litros la cuota base, lo que a decir de María González es una buena decisión, pero no justifica reducir el derecho humano al agua de la población sin subsidio directo.
Para el coordinador del Observatorio Ciudadano para la Gestión Integral del Agua en Jalisco, Juan Guillermo Márquez, la decisión del SIAPA va contra las recomendaciones de la Organización de las Naciones Unidas, pues una familia de 4 personas debería recibir mínimo 6 mil litros de agua al mes, especialmente en medio de una pandemia.
"Eso muestra la poca sensibilidad que hay hacia la gente y la situación que se está padeciendo, es el primer síntoma, el siguiente es que ya están por debajo del mínimo recomendado por Naciones Unidas, que sería la recomendación vigente entre 50 y 100 litros por persona por día, entonces, si de por sí ya lo habían tomado al mínimo, en 50, y suponiendo que el promedio en los hogares sea de 4 personas, estamos hablando de 6 mil litros al mes, el bajarlo a 5 mil es una reducción importante", considera.
El experto advierte también que el SIAPA incumple el derecho al agua potable al suministrar líquido de mal olor y turbio, como ocurre en distintas zonas de la ciudad y las personas pueden enfermar si beben esa agua; al hacer el recorte en pandemia y en medio de las dificultades económicas que ocasiona, se agrava la situación, pues según la ONU el gasto total en agua potable no debe rebasar el 3 por ciento de los ingresos de una familia.
Además, el costo del agua para quienes consumen más de esos cinco mil litros de agua al mes registra incrementos de hasta el 27 por ciento, a diferencia de grandes consumidores que superan los 250 mil litros al mes, o el caso de las industrias, pues en esos casos el SIAPA sólo aumenta el cobro un 3 por ciento, igual que la inflación.