Activistas y expertos coinciden en que el siguiente paso, urgente, para proteger a La Primavera es la creación de una verdadera zona de amortiguamiento entre la ciudad y el bosque, donde se refuerce el cuidado y protección no solo dentro del área natural protegida, sino especialmente hacia el exterior.
"La única solución a largo plazo para seguir teniendo un bosque, un bosque en donde pueda seguir transitando el puma, donde pueda existir toda la cadena alimenticia de fauna, en las condiciones en que está el bosque todavía, porque es un bosque vivo, pues es poder proteger los corredores biológicos, la única forma de poderlo hacer es generando estrategias al exterior", advierte Pedro Alcocer Santos, coordinador de proyectos de la organización Anillo Primavera.
Anillo Primavera, integrada por sociedad civil y científicos, es una de las asociaciones que desde hace años investiga y presiona sobre la necesidad de crear la zona de amortiguamiento y transición.
Esta organización detectó 21 fraccionamientos de Tlajomulco y Zapopan que invaden el bosque y sus alrededores, e incluso cinco se extienden dentro de la zona protegida, en más de 400 hectáreas.
Y un estudio de la UNAM detectó que desde los años 70 se construyeron más de mil 800 hectáreas de viviendas alrededor del bosque; las industrias crecieron sobre más de 300 hectáreas, además de un crecimiento acelerado de invernaderos (más de 300 hectáreas) y actividades extractivas (más de 800 hectáreas).
Presencia de construcciones alrededor de La Primavera en 1971:
Presencia de construcciones alrededor de La Primavera en 2019:
El "Informe final sobre la la evolución de la infraestructura al interior de la reserva y en sus alrededores" fue realizado por científicos del Centro de Investigaciones en Geografía Ambiental de la UNAM, encabezados por Adrián Ghilardi, y fue entregado al OPD Bosque La Primavera en mayo de 2020.
Un tema relacionado con el avance de la ciudad hacia el bosque es el del fuego. La mayoría de los incendios que afectan al bosque vienen de fuera: 8 de cada 10 inician en la periferia y se extienden hacia adentro.
"Entre más movimiento de gente tengas en la cercanía del bosque, más peligro hay", advierte el investigador del Departamento de Producción Forestal de la Universidad de Guadalajara, Gerardo Alberto González Cueva. "Si hiciéramos una historia, año por año, cómo se han ido incorporando cambios de uso de la tierra alrededor del bosque, todos los años tendríamos algún caso, la pregunta aquí es: ¿Cuándo vamos a parar? ¿Cuándo vamos a establecer ese perímetro de seguridad para el área protegida en donde lo que tengamos sea un uso de la tierra compatible con el bosque?".
El investigador advierte que además de incendios y construcciones alrededor del bosque, la falta de una zona de amortiguamiento genera que sean frecuentes fenómenos como el que mascotas domésticas se escapen de asentamientos humanos, se vuelvan ferales y cacen animales silvestres originarios del bosque, lo que impacta en la biodiversidad. También la proliferación de especies de flora exóticas que invaden y desplazan a las plantas nativas, así como el incremento de contaminación, atropellamientos de fauna y la interrupción de los corredores biológicos de especies que recorren trayectos hacia otras zonas naturales.
Frente a estas amenazas de la periferia del bosque, el primer avance serio para crear una zona de amortiguamiento ocurrió en 2018 con el decreto de protección del Cerro del Tajo, promovido por vecinos que rechazaron la construcción del fraccionamiento Santa Anita Hills.
"No sólo protegió las 60 hectáreas del fraccionamiento que en un principio nosotros nos opusimos, sino que además permeó la protección a mil 684 entre Tlajomulco y Zapopan", recuerda Tania Vázquez, de la Unión de Colonias Puerta Sur, "en este momento vienen a ser lo que es el primer polígono de amortiguamiento, de protección, en la zona del bosque de La Primavera".
Pero sigue pendiente dar protección al resto del área que rodea al bosque y los corredores biológicos presentes en los municipios que tocan La Primavera: Zapopan, Tlajomulco, Tala y El Arenal.
"En el Programa de Ordenamiento Ecológico Local (POEL) de Tlajomulco sí se respetó, pero se agregó un extra al bosque de La Primavera con el Cerro Viejo, cosa que no pasó con el de Zapopan, que sí blinda el decreto del Cerro del Tajo, pero deja desprotegido nuevamente el Cerro del Tepopote y nuevamente un corredor hacia la barranca de Huentitán, entonces ahí, ¿qué podemos pensar la ciudadanía? ¿Que pronto esa parte pudiera ser construida con algo?", cuestiona Tania Vázquez, también integrante del colectivo Salvemos El Bosque.
"Los gobiernos municipales y sobre todo los que rodean al bosque, deben tener la ética ya de definir lo que es una área de amortiguamiento del bosque de La Primavera", advierte.
En 2006, la UNESCO reconoció a La Primavera como reserva de la biósfera, aunque señaló la falta de la zona de amortiguamiento y transición. Ya pasaron 15 años y nuestro bosque permanece entre el 2 por ciento de las reservas reconocidas mundialmente que no tienen una zona de amortiguamiento.