Vecinos tonaltecas rechazan el basurero de Matatlán operado por Caabsa

Habitantes del fraccionamiento Urbi, en Tonalá, bloquearon el camino a Matatlán este domingo como parte de una protesta en contra del basurero irregular que en el sitio opera la empresa concesionaria Caabsa.

Desde el año 2004 comenzó el cierre de este basurero por no contar con medidas ambientales y estar rebasado, y quedó como una estación de transferencia donde camiones recolectores depositaban los residuos para ser transportados en góndolas al relleno sanitario Los Laureles.

Pero al cerrar Laureles, Caabsa decidió utilizar Matatlán como nuevo tiradero, lo que genera malos olores y contaminación para los fraccionamientos ubicados a menos de 500 metros.

"Nos decían que era únicamente una plataforma de transferencia, no es así, porque si fuera de esa manera no estarían los cúmulos, los cerros (de basura) cada día creciendo", denuncia  Verónica, vecina de Urbi desde hace más de diez años, durante la manifestación del domingo, "por eso nos decidimos reunir los vecinos que estamos más interesados, para poder ya impedir que sigan trayendo más basura aquí al tiradero; está tan cerca que por las tardes, en las noches, en la mañana, tenemos un olor horrible a basura, te despiertas y parece que tuvieras el bote de basura a un lado de tu cama".

"Nos están violentando los derechos a la salud de niños y adultos, debido a que las 24 horas del día estamos oliendo olores bastante fétidos", señala la vecina Laura Leticia Gómez, "esto es insoportable, día y noche, en menos de diez minutos (llegan) veinte camiones, tenemos evidencias y yo creo que tenemos que ser escuchados".

A través de transparencia, la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial confirmó que no existe una autorización para la operación del basurero de Matatlán, ni como estación de transferencia ni como vertedero. Los vecinos exigen al Ayuntamiento de Tonalá clausurar el espacio y a las procuradurías estatal y federal de protección al ambiente revisar la contaminación y falta de permisos del tiradero.

De acuerdo con los habitantes organizados, son alrededor de 200 camiones diarios los que ingresan al basurero y hasta tres mil toneladas de basura.