El asesinato de cuatro policías municipales de Guadalajara ocurrido esta mañana en Tonalá, es una venganza por parte del crimen organizado a las acciones realizadas por la comisaría tapatía y en particular, por el comandante de agrupamientos especiales de la calle, Eduardo Plazola García.
En rueda de prensa alcalde Enrique Ibarra Pedroza informó que Plazola García tomó la jefatura de agrupamientos especiales en marzo del año pasado y fue el responsable de operativos realizados en zonas con mayor índice delictivo, como El Santuario, 5 de Febrero y Analco, entre otros.
"Bajo su liderazgo y trabajo logró asestar importantes golpes a grupos del crimen organizado y recuperar el estado de derecho y la paz, en zonas y barrios tradicionales de la ciudad, como 5 de Febrero, El Santuario, Analco San Juan de Dios y Oblatos, entre otros".
Ibarra Pedroza afirmó que no bajarán la guardia en el combate a la delincuencia y que colaborarán en lo que la Fiscalía disponga para que los responsables sean capturados.
"Lejos de bajar la guardia el Gobierno de Guadalajara intensificará nuestra misión de mejorar la paz y la seguridad a la ciudadanía. Y por supuesto, como gobierno de la ciudad nuestra disposición con las autoridades competentes para que la investigación desemboque en la captura de los agresores".
Por su parte, el Secretario General de Gobierno, Roberto López Lara, informó que la Fiscalía General del Estado ya inició con las investigaciones para dar con los causantes de la emboscada.
"Es un cobarde ataque a los elementos. Fueron sorprendidos, perdiendo la vida, nos unimos a la pena que embarga a la familia y sus compañeros. Al conocer de los hechos de manera inmediata se giraron instrucciones al Fiscal General para iniciar con las investigaciones y dar con los responsables de este cobarde ataque".
Aseguró que las autoridades de los tres niveles de gobierno van a seguir combatiendo a los grupos delictivos que quieren robar la tranquilidad de la ciudadanía.