Este año, con la llegada de la temporada de estiaje, se prepara también un operativo reforzado para identificar el huachicoleo del líquido vital y evitarlo a todo costa en Michoacán, pues en el año 2024 fue uno de los grandes problemas ambientales que enfrentó el Estado, el robo de agua en los cuerpos más importantes, esto con fines de riego de cultivos. De acuerdo a la Secretaría del Medio Ambiente, en el Lago de Pátzcuaro se detectaron más de 400 ollas ilegales en diversos municipios que lo rodean, dejando graves afectaciones en la acumulación de agua en la zona. De manera general, en el territorio michoacano hay 35 mil 500 ollas de agua, de estas, 20 mil 600 actualmente tienen líquido y aproximadamente 15 mil se encuentran secas, se realiza un barrido para detectar cualquier robo para alimentar ollas privadas.
El gobernador, Alfredo Ramírez Bedolla, detalló que ya se tienen identificadas, mediante el Guardián Forestal, ollas que podrían ser clandestinas, la Secretaría del Medio Ambiente, la Fiscalía General de Michoacán y la Comisión Forestal se encuentran trabajando en el análisis de estas, para ratificar su legalidad. En el municipio de Erongarícuaro, desde el pasado mes de febrero se comenzó a detectar el robo de agua. El 65% de las detectadas tienen menos de una hectárea de superficie, el 20% de ellas tienen de 100 a 200 metros y el 1% cuentan con más de una hectárea.
Alejandro Mendez, secretario de Medio Ambiente, dijo que, el Lago de Pátzcuaro, uno de los más afectados en 2024 cuenta con 68 mil metros cuadrados de capacidad alcanzada y terminó señalando que hay puntual seguimiento en los límites Morelia, Charo, ya que en esta zona se detectó una creciente presencia de huertas de aguacate y por ende, ollas de agua.
Gobernador: "La ley de aguas establece que podemos captar agua de lluvia, es legal, sí podemos captar agua de lluvia, sí, pero aún así debemos darle aviso a la Comisión Nacional del Agua" min. 0:23-0:41 "En pleno mayo detectamos que tiene agua, algo está ocurriendo ahí".