México reportó 27,794 homicidios dolosos de enero a noviembre de 2024, lo que representa un incremento del 1.47 % en comparación con las 27,391 víctimas registradas en el mismo periodo de 2023, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (Sesnsp). Estas cifras implican un promedio de casi 83 asesinatos diarios en el país, reflejando el desafío que enfrenta el gobierno en materia de seguridad.
En noviembre de 2024, se contabilizaron 2,461 homicidios dolosos, un aumento del 4.7 % respecto al mismo mes de 2023, cuando hubo 2,351 víctimas. Sin embargo, esta cifra representa una reducción del 4.2 % en comparación con los 2,570 homicidios ocurridos en octubre, el primer mes de la presidencia de Claudia Sheinbaum. En sus primeros dos meses de mandato, se han registrado un total de 5,031 asesinatos.
En contraste, los feminicidios han mostrado una ligera disminución. De enero a noviembre de 2024, se reportaron 762 asesinatos de mujeres por razones de género, una caída del 3.67 % en comparación con las 791 víctimas del mismo periodo del año anterior. Solo en noviembre, hubo 59 feminicidios, una disminución interanual del 20.3 % y un retroceso mensual del 15.7 %.
La presidenta Claudia Sheinbaum, quien asumió el cargo el 1 de octubre, ha señalado que revertir la violencia es una prioridad de su administración. Durante el mandato de su antecesor, Andrés Manuel López Obrador, el país acumuló más de 196,000 asesinatos, según la organización Causa en Común.
En respuesta, Sheinbaum presentó un plan de seguridad basado en cuatro ejes: atención a las causas de la violencia, fortalecimiento de la Guardia Nacional, uso de inteligencia para combatir el crimen y coordinación entre autoridades federales y estatales.
Sheinbaum subrayó la importancia de atender a los jóvenes como parte de su estrategia para reducir la violencia. "¿Qué quiere decir esto? Atender principalmente a las y los jóvenes de nuestro país, y eso es con acceso al empleo, acceso a la educación, acceso a una opción de vida distinta a la que significa la violencia", afirmó.
Si bien la reducción mensual en los homicidios dolosos y feminicidios es un indicador positivo, el incremento interanual en los asesinatos plantea dudas sobre la efectividad de las políticas de seguridad a largo plazo. La administración de Sheinbaum enfrenta el reto de contener la violencia en un país donde la delincuencia organizada y los altos índices de impunidad continúan siendo problemas estructurales.
Los próximos meses serán clave para evaluar si el plan de seguridad de la nueva presidenta logra resultados sostenibles, mientras millones de mexicanos esperan vivir en un entorno más seguro.