La violencia en Sinaloa continúa dejando cifras alarmantes, con las desapariciones forzadas siendo uno de los problemas más graves.
Según el secretario General de Gobierno de Sinaloa, Feliciano Castro Melendrez, entre agosto de 2024 y enero de 2025 se han reportado mil 19 casos de desapariciones forzadas en el estado, de los cuales solo 393 víctimas han sido localizadas hasta el momento. Las autoridades siguen con los operativos de búsqueda para dar con el paradero de las personas desaparecidas.
Castro Melendrez respondió a las preocupaciones de la familia de Sergio Guzmán Garate, un empresario desaparecido en Mazatlán hace un mes, asegurando que las autoridades judiciales están encargadas de investigar su caso, al igual que muchos otros. A pesar de los esfuerzos, el secretario reconoció que aún no se tienen los resultados esperados en cuanto a la localización de víctimas y el esclarecimiento de los hechos.
La violencia en Sinaloa ha sido constante y ha afectado a diferentes áreas del estado. Las privaciones ilegales de la libertad, los homicidios dolosos y los despojos de vehículos son algunos de los crímenes más comunes.
Sin embargo, el secretario destacó que los homicidios dolosos han mostrado una tendencia a la baja, con 182 casos registrados en octubre de 2024 y solo 138 en enero de 2025, lo que sugiere que las estrategias de seguridad están teniendo cierto impacto en la reducción de estos crímenes.
A pesar de esta mejora en los homicidios, la violencia sigue siendo un problema grave en Sinaloa. En los últimos días, se han registrado varios asesinatos múltiples en talleres y expendios de bebidas alcohólicas, aunque las autoridades no han identificado un patrón claro en estos casos. Cada uno está siendo investigado de acuerdo con sus características y posibles antecedentes de las víctimas.
El gobierno estatal y las fuerzas federales continúan con operativos en varias partes del estado, lo que ha permitido la detención de importantes sospechosos, así como el aseguramiento de armas y vehículos involucrados en actos delictivos. Estas acciones han sido fundamentales para intentar controlar la situación de violencia que afecta a Sinaloa desde hace varios meses.
Por otro lado, los habitantes de la sindicatura de Jesús María, quienes sufrieron daños a sus viviendas durante un operativo federal, aún no han presentado denuncias formales ante las autoridades. El secretario indicó que, si bien los daños fueron reportados, las víctimas deben formalizar sus denuncias para que las autoridades puedan tomar las medidas necesarias. Las personas afectadas están siendo atendidas por la Subsecretaría de Derechos Humanos del Estado y la Comisión Estatal de Protección a Víctimas.
La situación en Sinaloa sigue siendo compleja, y las autoridades continúan trabajando en la identificación de los responsables de los crímenes. Aunque algunos avances se han logrado, la violencia y las desapariciones forzadas siguen siendo un reto para el gobierno estatal y federal.