El Ayuntamiento de Morelia, aseguró en dos operativos cerca de 100 kilos de pólvora y pirotecnia que se vendían de manera ilegal sobre la vía pública. En el primer caso se aseguró pirotecnia sobre la calle Andrés del Río, a un costado del mercado Independencia, y en otra acción sobre la calle Carlos Rovirosa de la colonia Guadalupe.
El Gobierno de Morelia, hace un exhorto a la población a no comprar ni vender pirotecnia porque ponen en peligro su vida y la de terceros, al margen de las implicaciones legales en que incurren.
Entre los productos con pólvora asegurados se encuentran "palomitas", cohetones, bengalas y fuegos artificiales diversos que ponen en peligro la vida de quien los vende y los compra, así como de terceros. Al momento se han realizado una docena de acciones que buscan inhibir esta práctica ilegal, con operativos conjuntos en las colonias Felipe Carrillo Puerto, Jesús Romero Flores, La Soledad, El Realito, Eduardo Ruíz y Col. Guadalupe, así como en puntos de la Av. Pedregal y Av. Torreón Nuevo.
Se llama pirotecnia a los dispositivos que están preparados para que ocurran reacciones pirotécnicas en su interior. Las reacciones pirotécnicas ocurren por combustión no explosiva de materiales, que pueden generar llamas, chispas y humos. Los dispositivos pirotécnicos pueden contener también elementos para que ocurran algunas reacciones explosivas controladas. Las reacciones pirotécnicas pueden estar iniciadas por elementos eléctricos, y luego encender dispositivos pirotécnicos que permiten programar la ocurrencia de otras reacciones pirotécnicas. Los dispositivos pirotécnicos que tienen efectos visuales, sonoros y fumígenos con una finalidad lúdica y de espectáculo son conocidos como fuegos artificiales, fuegos de artificio, fuegos pirotécnicos o juegos pirotécnicos.
Por ser productos explosivos y de ignición, el peligro de quemaduras y de incendios es un corolario potencial de alta probabilidad que hay que tomar en cuenta, por lo que en varios países hay control por entes dedicados también al control de armas y demás instrumentos explosivos como la misma pólvora, como es el RENAR en Argentina.
Una mala manipulación puede provocar explosiones fortuitas, con amputación de partes de la mano o algo peor. Este tipo de incidentes son bastante comunes en personas no experimentadas que adquieren destreza pirotécnica ocasionalmente con fines lúdicos.