La Organización de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) manifestó su preocupación luego de las detenciones arbitrarias que se dieron en la marcha del pasado 8 de marzo en Morelia.
Acusa que los manifestantes habrían sido víctimas de detenciones arbitrarias y uso excesivo de la fuerza, y periodistas habrían sufrido agresiones por parte de fuerzas policiales.
De igual manera destaca que la función de las fuerzas de seguridad en manifestaciones es facilitar el derecho a la protesta, así como garantizar un espacio seguro y propicio para quienes participan en las mismas, las acompañan.
Menciona además que bajo el estándar internacional de precaución, el Estado tiene la obligación de tomar medidas antes, durante y después de las protestas para reducir al mínimo la posibilidad de violaciones a derechos humanos, incluyendo por uso de la fuerza.
"La ONU-DH urge a las autoridades a investigar estos hechos, transparentar la actuación de las fuerzas de seguridad, adoptar medidas de no repetición y asegurar una reparación integral de las víctimas", refirió mediante sus redes sociales.